Durante la mañana de este martes, un equipo policial del l° Distrito Urbano que realizaba recorridos preventivos en distintas zonas céntricas, observó en intersección de calles Charcas y Díaz Vélez, a dos hombres vendiendo una MacBook y una máquina de cortar pelo.
Esta situación llamó la atención de los uniformados, quienes habían tomado conocimiento, minutos antes, sobre una denuncia realizada en Comisaría 1° el día domingo, donde un joven denunció que había sido víctima de un ilícito.
Es por esto que, los empleados policiales decidieron intervenir en lo que ocurría, consultándoles a los vendedores la procedencia de los objetos, pero estos no supieron justificar.
A raíz de lo sucedido, el personal secuestró los dispositivos y $10.000 en efectivo.