¿Cómo gestionan dos intendentes sin ayuda del Poder Ejecutivo?

Los municipios no firmantes del acuerdo fiscal están en superávit. Según Molinuevo, el fondo coparticipable duplicó lo que ofrecía el Gobierno.

Alejandro Molinuevo Alejandro Molinuevo

Con el segundo mes del Acuerdo Fiscal Municipal (AFM) en curso, mediante el cual la Provincia ofrece ayuda financiera a los gobiernos locales, los municipios que desistieron de su firma analizaron cómo llevan el manejo de sus finanzas en la actualidad. Burruyacu no forma parte del Pacto Social desde hace más de seis años, por lo que los números siguen más o menos igual; pero Concepción insiste en que recibe más fondos estando fuera del acuerdo que dentro de él, por una diferencia de casi el 50%.

El intendente de la ciudad sureña, Alejandro Molinuevo, mencionó que la propuesta del Ejecutivo -previo al rechazo de la firma del AFM- consistía en un aporte mensual de $350 millones a cambio de ceder la coparticipación de impuestos. “Vaya sorpresa cuando, en enero, vimos que el goteo (de esta categoría) llegó a los $600 millones, prácticamente el doble”, remarcó.

¿Cómo gestionan dos intendentes sin ayuda del Poder Ejecutivo?

Con el primer monto, insistió el intendente, apenas habría alcanzado para cubrir la planilla salarial de los empleados. “No daba margen a nada; había otros municipios de segunda categoría cuyas propuestas eran mucho más elevadas. Y además nos imponían una cláusula que decía que debíamos renunciar a cualquier acción judicial”, juzgó.

A su vez, Molinuevo reiteró su postura de que la Ley de Coparticipación debería ser modificada en Tucumán. “Debe adecuarse a la media de lo que ocurre en el país, que es distribuir o repartir los impuestos nacionales y provinciales en un 20%, en promedio; en la provincia es un 13%”, defendió el radical.

A favor de la reestructuración del sistema de fondos provincial, el jefe municipal aseveró: “Confío en que en Tucumán se animen a tomar una determinación que vaya en beneficio de todos los municipios, para que de una vez por todas sean autónomos y no tengan que andar todos los meses mendigando, depende de si sos oficialista u opositor, para ver qué te dan”. Y siguió: “Creo en la Constitución Nacional, y como hombre de derecho, estoy totalmente convencido de que las autonomías municipales deben regir. Son los gobiernos locales los que hoy se hacen cargo de muchas obligaciones que antes eran provinciales o nacionales, y lo hacemos con gusto”.

Más responsabilidad

En el caso de Concepción, Molinuevo indicó que esta decisión le ha permitido hacerse cargo de la administración de la seguridad, de la educación y de otros temas que le correspondían a la Provincia. Mencionó como ejemplo a la escuela municipal Octavio Muedra Tasquer, que cuenta con casi 1.000 alumnos, y continuó: “En seguridad, el municipio construyó dos comisarías, completas y con mobiliario, y se las entregó a la Policía de Tucumán; en salud, hoy estamos con una campaña intensiva contra el dengue, con un Departamento de Salud flamante que trabaja en conjunto con el Siprosa”.

El concepcionense reafirmó: “Yo tengo la bandera de la autonomía. Y a partir de la autonomía se puede soñar con ciudades modernas, tecnológicas. Si no la hay, vamos a estar dependiendo siempre de lo que el Gobierno pueda dar”.

En paralelo, el opositor analizó con buenos ojos la postura del gobernador, Osvaldo Jaldo, de querer igualar los sueldos de los trabajadores municipales con los de los provinciales, por la diferencia que existe entre ambos. “Es un punto positivo. Esto de ser más autónomo y salir del Pacto significa un tremendo desafío y responsabilidad”, sostuvo.

También aseguró que el municipio sureño cuenta con los fondos necesarios para hacer frente a esta disposición. “Todavía no se hizo en la práctica, pero los seguimos a ellos en lo que son las fechas de pago. Estamos preparados para pagar, con el dinero que nos gotea de coparticipación y Fondo de Desarrollo del Interior”, señaló Molinuevo.

Sin embargo, el Ejecutivo municipal repitió que con un porcentaje coparticipable acorde a las necesidades de las jurisdicciones, habría más beneficios para cada una de ellas. “(De esta forma), Concepción proyectaría grandes obras; podría ejecutar una avenida Costanera o un polideportivo municipal que son grandes sueños que tenemos para los concepcionenses”, ejemplificó. “Lo intentamos en el gobierno de (Mauricio) Macri, después en el de (Alberto) Fernández), pero no se pudo por la vía amistosa así que el 5 de octubre interpusimos una acción judicial y estamos esperando la sentencia con cierta esperanza. Si otras provincias lo pudieron hacer ¿por qué no Tucumán?”, planteó Molinuevo.

Además, acerca de las indefiniciones -que luego fueron resueltas- sobre que Concepción mantenía una deuda con la Provincia, explicó que el municipio está completamente saneado. “No le debemos nada a nadie y podemos decir que tenemos un futuro prometedor; más aún si llega a reformarse la ley por sentencia. Aún sin eso y cuidando el dinero que entra, bajamos a casi 100 agentes municipales que no cumplían sus funciones. Deberíamos tener todos los servicios al día, la ciudad limpia y una buena recolección de residuos, que lo hacemos por administración”, dijo Molinuevo.

En Burruyacu

En tanto, en el caso de Burruyacu, Jorge Leal diferenció el AFM del convenio salarial que le corresponde a dicha jurisdicción y a otras cinco más. “Burruyacu, al igual que Trancas, Graneros, La Cocha, Simoca y Las Talitas, no firmamos el Pacto Social sino convenios salariales. A través de ellos, el Gobierno otorgaba fondos para afrontar los incrementos salariales”, explicó.

¿Cómo gestionan dos intendentes sin ayuda del Poder Ejecutivo?

Sin embargo, hace más de seis años que el municipio no participa de este acuerdo. “En toda la gestión anterior, se afrontaron con recursos propios los incrementos salariales. Tenemos cero deudas con la Provincia, no estamos firmando ningún acuerdo ni convenio”, señaló el intendente.

En su lugar, el Ejecutivo municipal completa el pago de los sueldos con ingresos coparticipables de la Nación y de la Provincia. “Gracias a esto y a lo que venimos haciendo desde hace tiempo, tenemos un superávit fiscal que nos da la posibilidad de afrontar los incrementos sin solicitar ayuda provincial”, consideró.

Este último punto, Leal lo explica a partir de la administración que lleva el municipio hace más de 20 años. “En ese tiempo, incrementamos únicamente un 10% la planta del personal. Eso nos permitió no tener deuda y que nos podamos manejar con nuestros propios recursos”, remarcó el intendente.

Sí reconoció que el monto coparticipable de enero es un tanto mayor que el de diciembre, porque se les suma anticipos de algunos impuestos. “Debe haber entre un 20% y un 30% de diferencia; el ingreso de enero siempre fue mayor”, dijo Leal.

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