Las obras que se llevan adelante en el puente Lucas Córdoba hicieron una pausa obligatoria. Es que el tiempo puso freno a la segunda parte de los trabajos de repavimentación que se habían iniciado sólo días atrás en la zona.
Las lluvias que arrancaron el domingo, y continuaron durante la jornada de ayer aguaron las posibilidades de llevar a cabo el plan original, que espera un guiño del sol para seguir a paso firme.
Así lo confirmó el titular de la Dirección Provincial de Vialidad, Marcelo Nazur, que dialogó con LA GACETA para dar detalles de esta reparación. Dijo que si el viento sopla a favor, los trabajos se reanudarían el jueves para extenderse hasta el sábado.
“Se trabaja en el retiro de la capa de rodadura del puente, que es una carpeta asfáltica que ya ha sido removida”, explicó al respecto. “Se cumplieron las tareas bien durante los días viernes, sábado y domingo de la semana pasada y la idea era reponer esa carpeta desde el día martes hasta el jueves pero las precipitaciones no lo permitieron”, agregó.
Por el momento las máquinas se encuentran al costado del camino mientras esperan entrar en acción y terminar lo ya iniciado en las fechas patrias.
Lo realizado
La obra se ideó en dos partes, por lo que durante el fin de semana extra largo de junio hubo cortes programados durante los que se realizaron las primeras tareas.
“Ya se hizo el levantamiento de la capa asfáltica y el nivelado de las ondulaciones que tenía el puente sobre los costados”, indicó al respecto Juan Rayo, secretario de Obras Públicas de Banda del Río Salí, en diálogo con LG Play. Este es uno de los sectores más utilizados por motociclistas y ciclistas. A causa del parate en los trabajos, el funcionario destacó: “por el momento, se puede usar el ancho total del puente”.
No obstante, en ese sentido pidió a los conductores transitar con precaución por la zona, debido a la lluvia y a las condiciones en las que se encuentra el asfalto sin terminar.
Lo que sigue
Ahora se está esperando que la lluvia brinde una tregua. Es crucial, según explicó Nazur. “La humedad influye mucho en los áridos que se usan para la elaboración de la mezcla asfáltica. Sí o sí tenemos que tener un día de sol para ventilarlos”, remarcó el titular de Vialidad.
Mientras que sobre la continuidad de los trabajos mencionó: “según el pronóstico dejará de llover en las próximas horas por lo que podremos ventilar los áridos y sacarles la humedad, así el jueves empezaríamos a finalizar la obra”.
“Durante esos días terminaríamos la carpeta de rodamiento del puente, que es una carpeta asfáltica de cinco centímetros de espesor, y el día lunes estaríamos haciendo la demarcación horizontal del paso”, puntualizó.
El funcionario adelantó que habrá una renovación de las señales de tránsito. “Van a quedar bien dispuestas las señales reflectivas sobre la calzada, y se agregarán otras en forma vertical que indiquen los accesos”, comentó.
Desvíos
La Municipalidad de Banda del Río Salí informó que por el puente Lucas Córdoba transitan cerca de 80.000 vehículos por día, de manera que los cortes afectan a una gran cantidad de conductores.
“El puente se va a cortar en forma total los días en los que se realicen los trabajos, de 8.30 a 17.30”, remarcó Nazur.
En tanto, sobre las opciones que habrá para llegar a la ciudad del este, habrá dos alternativas.
En primera instancia se podrá acceder por el puente ingeniero Barros, de avenida Perón, que conecta a la capital con Alderetes y el aeropuerto Benjamín Matienzo. En ese caso, el desvío implicaría ir hacia el norte.
Otra opción es ir hacia el sur del puente Lucas Córdoba y cruzar el río Salí por el puente de la Ruta 9, que se encuentra ubicado a la altura del acceso al barrio San Cayetano de la capital.
Preocupación y esperanza
Ramón Herrera es un vecino del este que camina por la zona del puente todos los días y aunque se mostró conforme con que se desarrolle esta obra, manifestó preocupación también por estos días de trabajo.
“Lo que no me gusta es el procedimiento que realizan. En los días que estuvo cortado las motos pasaban por la vereda lo que es un peligro para el peatón”, relató, y admitió: “Camino todas las mañanas por esta zona y esos días se volvió muy complicado hacerlo”.
En ese sentido dejó un consejo para la continuidad de las tareas: “deberían reforzar el plan de seguridad, con vallas para que se indique bien por dónde se puede caminar sin correr riesgos”.
Guadalupe, por su lado, que vende empanadas antes del inicio del puente, refirió que siente que no hubo mayores complicaciones por los trabajos. “No escuché quejas de los conductores que se detienen a comprar o de la gente de la zona. Los colectivos doblan antes y siguen sin problemas”, aseveró.
Luz Díaz, que viaja a trabajar en un negocio de la capital, finalmente sumó su testimonio para señalar que la semana pasada debió levantarse más temprano para llegar a tiempo y tener paciencia para volver a casa. “Por los desvíos la vuelta se hace muy larga, entonces nos alivia a los que transitamos por el puente que no sea demasiados los días de corte”, desarrolló.
No obstante, consideró que la reparación era necesaria. “En el estado actual del puente había muchos accidentes de tránsito, sobre todo protagonizados por motociclistas -remarcó-. Se debió hacer algo así hace un tiempo; en hora buena que lo realicen ahora”.