Es tucumana, integra la selección argentina de patín, y debió vender rifas para poder participar de un evento panamericano

Desde mañana, Sara Rossi competirá en los Campeonatos Panamericanos de Patinaje en Colombia, tras hacer malabares para conseguir los fondos necesarios.

Es tucumana, integra la selección argentina de patín, y debió vender rifas para poder participar de un evento panamericano LA GACETA / Foto de Juan Pablo Sánchez Noli
Joel Katz
Por Joel Katz 01 Julio 2024

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En Argentina, ser deportista de alto rendimiento es todo un desafío debido a la falta de apoyo. Aún más en aquellos deportes que no son tan masivos y en lo que todo se realiza a pulmón. Ese es el caso de Sara Rossi, patinadora tucumana de 19 años, que está próxima a competir en los Campeonatos Panamericanos de Patinaje en Ibagué, Colombia, y que debió rebuscárselas para conseguir los fondos necesarios para poder participar.

“La clasificación a este evento se dio a través de tres instancias: dos competitivas y un entrenamiento. La primera fue en marzo en el Nacional de Córdoba; la segunda en mayo, con otro Nacional en Córdoba, y la tercera en un entrenamiento que fue una semana después de este campeonato, en Buenos Aires, con dos días de entrenamientos intensivos”, explicó Rossi, en diálogo con LA GACETA, sobre cómo accedió a una plaza para el certamen continental que se disputará desde hoy y hasta el miércoles 10.

En aquellos dos certámenes nacionales obtuvo un cuarto y un octavo puesto que, junto a su buen desempeño en la revisión técnica que se llevó a cabo en los entrenamientos posteriores, la dejaron como primer suplente en la Selección. Sin embargo, ante la baja de una de las titulares, terminó metiéndose en la nómina definitiva.

Pero aún con el lugar asegurado desde lo deportivo, surgió un nuevo escollo para la tucumana: el factor económico. Hasta comienzos de este mes, Rossi debía juntar 3.280 dólares para cubrir los gastos relacionados con el certamen, que incluyen la inscripción, el pasaje aéreo, la estadía y los traslados en Colombia. Una tarea nada sencilla, teniendo en cuenta el poco apoyo que recibe su disciplina, tanto a nivel local como nacional; que incluso la obliga a llevar adelante su preparación de una manera particular.

“Las posibilidades dentro de este deporte en Tucumán son muy limitadas, tanto que actualmente me voy una vez por mes a entrenarme a Buenos Aires con mi profesor de allá. Cuando estoy acá, mantengo los entrenamientos con él por videollamada acompañada de mi actual profesor de Tucumán, Miguel Grima, que me dio una mano enorme a nivel emocional”, detalló.

Es tucumana, integra la selección argentina de patín, y debió vender rifas para poder participar de un evento panamericano

Si quedan dudas de que en el patín es todo a pulmón, Sara las aplaca contando los sacrificios que debe hacer para poder mantener su carrera. “Al ser un deporte amateur, todos los gastos salen del bolsillo de cada familia ya que es muy difícil conseguir sponsors o ayuda económica, porque son deportes con poca visibilidad y difusión”, explicó.

Para este Panamericano en particular, debió combinar varias acciones para conseguir dinero. “Estuve haciendo rifas, dando clínicas de perfeccionamiento de patín con el costo de inscripción a beneficio del campeonato y sumé ayuda de algunos sponsors. Soy profesora de patín y todo mi sueldo fue para ahí. Mi papá es herrero y adelantó varios presupuestos y mi mamá también adelantó sueldos”, detalló.

Claro, esto no es nada nuevo para Rossi que practica el deporte desde hace 15 años (empezó cuando tenía apenas cuatro). “En el club donde mi hermano hacía fútbol también practicaban patín. En una de las visitas al entrenamiento de mi hermano, vi a gente haciendo patín y le pedí a mi mamá ir”, recuerda Sara, sobre el momento en que se enamoró del deporte que hasta el día de hoy la apasiona.

¿Qué es lo que la atrapó? “Los desafíos que complementan el deporte, la adrenalina de la competencia y las habilidades que hay que desarrollar para seguir avanzando”, enumeró Rossi.

Es tucumana, integra la selección argentina de patín, y debió vender rifas para poder participar de un evento panamericano LA GACETA / Foto de Juan Pablo Sánchez Noli

Por supuesto, ir progresando rápidamente y obteniendo buenos resultados también ayudó a que el lazo con el patín sea cada vez más fuerte. Desde los nueve años, comenzaron a llegar grandes resultados: a esa edad, fue campeona nacional en Bariloche, y en los meses siguientes, fue quinta en la Copa Filippini en Italia, medalla de bronce en la Copa Santos en Brasil, y subcampeona sudamericana en Paraguay.

Durante los años que siguieron, cosechó varios títulos nacionales en la modalidad libre (en la que competirá en Colombia), además de sumar participaciones a nivel internacional, tanto en Panamericanos (en 2016 fue cuarta) como en Sudamericanos, y hasta en una Copa Mundial en Alemania en 2022, en la que fue Top 10.

Solamente en 2020 y 2021, Sara se ausentó del seleccionado nacional por cuestiones personales. De hecho, en ese tiempo, estuvo muy cerca de dejar el deporte. “Mi profesor de ese momento dejó de dar clases al nivel alto y no pude encontrar otro profesor en Tucumán que me pueda entrenar. Fue justo después de que inició la pandemia y fue un momento muy difícil a nivel emocional”, reveló Rossi. Sin embargo, pudo encontrar un reemplazo a la altura y las fuerzas necesarias para seguir en el patín. Así volvió de la mejor manera.

Habiendo conseguido los fondos necesarios que le permitieron también participar de un selectivo mundialista en San Juan un par de semanas atrás, Rossi tendrá en Colombia una nueva experiencia internacional en la que intentará obtener el mejor resultado. “El objetivo es dejar a Argentina lo más alto posible”, dijo dejando en claro que pretende seguir disfrutando del deporte que tanto ama y por el que tanto sacrifica.

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