Cuando nos indican que para mantener un peso saludable necesitamos hacer ejercicio lo primero que pensamos es en las temidas salidas a correr y pesas enormes y agotadoras. Pero existen otras formas de hacer ejercicio que no requieren matarnos en el gimnasio.
Una forma de hacer ejercicio sin agotar todas nuestras energías y sin suponer agotarse en vueltas a una plaza sin descanso es el HIIT walking. Se trata de una forma novedosa de hacer una caminata añadiendo dinámicas de pausas y esfuerzos para equilibrar una salida al aire libre con el ejercicio que necesitamos a diario.
¿De qué se trata el HIIT Walking?
El HIIT walking (Entrenamiento Intervalado de alta intensidad por sus siglas en inglés) es un tipo de entrenamiento en el que combinamos intervalos cortos de caminata a alta intensidad con períodos de descanso breves o caminata a un ritmo menor. Así es que intercalamos el caminar rápido con mayor esfuerzo en poco tiempo y luego seguir a baja intensidad para no agotar nuestro cuerpo. Luego este ciclo se repite para lograr una rutina efectiva.
Esta técnica de caminata puede practicarse por el tiempo que necesitemos. Por ende no es que tengamos que ocupar una hora o dos de nuestro tiempo como así lo pensaríamos sobre un gimnasio. Con una sesión de diez minutos es más que suficiente. Para realizarla debemos tener en cuenta sin embargo algunas recomendaciones.
¿Cómo sería una rutina de este tipo de ejercicios?
Antes de comenzar a hacer nuestro paseo debemos realizar un calentamiento de cinco minutos, de esta manera prepararemos los músculos, anticipando el ejercicio que vamos a realizar. Una vez listo este paso comenzaremos el ejercicio. Este debemos dividirlo en tres intervalos de trabajo, donde iremos incrementando en intensidad hasta llegar al minuto cinco, para luego caminar tranquilamente por cinco minutos.
- Intervalo 1: Caminá a un ritmo rápido durante 1 minuto.
- Descanso: Caminá a un ritmo suave durante 30 segundos.
- Intervalo 2: Caminá a un ritmo rápido durante 2 minutos.
- Descanso: Caminá a un ritmo suave durante 30 segundos.
- Intervalo 3: Caminá a un ritmo muy rápido durante 1 minuto.
- Enfriamiento: Caminá a un ritmo suave durante 5 minutos.
Esta rutina podemos realizarla cuantas veces queramos en la semana, siempre y cuando contemplemos al menos un día de descanso entre cada sesión de ejercicio. Podemos comenzar haciéndolo una vez a la semana y ajustarlo a nuestras capacidades