14 Agosto 2024
Aunque tienden a clasificarse de modo separado, la salud mental y la salud física tienen un vínculo que las une estrechamente. Entre otros aspectos, los especialistas relacionan la depresión, la ansiedad y el estrés con una salud cardíaca deficiente.
"El corazón y la mente están fuertemente conectados, y tanto la depresión como la ansiedad y el estrés crónico aumentan el riesgo de complicaciones para la salud del corazón y el cerebro, según dos estudios preliminares que se (presentaron) en las Sesiones Científicas 2023 del American Heart Association", se destaca en la página web de la organización.
Salud de la mente y el corazón
En las investigaciones realizadas, los especialistas descubrieron que entre los efectos secundarios de los problemas de salud mental están la inflamación y la acumulación de grasas.
Los chequeos periódicos o de rutina son fundamentales para prevenir enfermedades graves e irreversibles. Por ello, el doctor Giovanni Civieri, investigador del Hospital General de Massachusetts y de la Facultad de Medicina de Harvard, alienta a las personas con depresión o ansiedad a hacer estudios frecuentes de valores como la hipertensión, el colesterol y la diabetes tipo 2.
"Aunque no investigamos este aspecto, es razonable suponer que el tratamiento de la depresión y la ansiedad puede reducir el desarrollo acelerado de factores de riesgo cardiovascular", explicó el médico de Harvard.
Hipertensión y salud mental
Un estudio dirigido por el Biobanco Mass General Brighman de Boston estudió un grupo de adultos sin problemas cardiovasculares durante 10 años.
De la totalidad de participantes, al menos el 38% desarrolló complicaciones cardiovasculares. Pero, quienes tenían un diagnóstico de ansiedad o depresión, desarrollaron estos factores de riesgo incluso seis meses antes que quienes tenían una salud mental equilibrada.
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