Nuestros niveles de glucosa en sangre pueden variar producto de distintos factores como la deshidratación, ciertas infecciones, dosis elevadas o bajas de medicamentos y por factores más bien vinculados con nuestras elecciones diarias, como las comidas calóricas y la falta de ejercicio. Sostenidos en el tiempo los niveles altos de azúcar pueden tener consecuencias en nuestro organismo. Una manera de reducir estos valores es incorporando algunas bebidas a nuestra dieta.
El azúcar en sangre es el nivel de glucosa que se encuentra en el torrente sanguíneo. Es considerado que los niveles de glucosa son normales cuando se encuentran en un parámetro de entre 70 y 100 miligramos por decilitro (mg/dL). Mantener estos valores es fundamental para nuestra salud, previniendo condiciones como la diabetes, una patología crónica en la que los niveles de azúcar se encuentran altos.
Para reducir los riesgos de padecer enfermedades y patologías más serias podemos adoptar distintas estrategias. De acuerdo a diversas investigaciones, ciertas comidas y bebidas pueden ayudar a reducir los valores de azúcar en sangre y mantenerlos en rangos más saludables.
Las tres bebidas que pueden ayudar a mantener niveles saludables de glucosa
Entre las bebidas más beneficiosas para maestros niveles de azúcar se encuentra el agua. Beber una cantidad adecuada de este líquido diariamente ha demostrado ayudar a reducir los niveles de azúcar en sangre, lubricar las articulaciones y beneficiar la salud integral. La cantidad recomendanda de ingesta de agua diaria depende del sexo, peso y edad, sin embargo, los investigadores han destacado que los adultos deben beber alrededor de 2 a 3.7 litros de este líquido diarios.
También existen otras bebidas que pueden reducir los niveles de azúcar en sangre, ideales para aquellos no tan simpatizantes del agua. El té verde ha demostrado ser beneficioso en la reducción de los niveles de azúcar en sangre. Esta bebida contiene catequinas, compuestos vegetales que pueden ayudar a mejorar la sensibilidad a la insulina. Esta última es una hormona producida por el páncreas que ayuda a controlar los niveles de glucosa en sangre.
Mientras que otros estudios han demostrado que la salsa de tomate es capaz de prevenir los altos niveles de azúcar. Esto se debe a un compuesto orgánico encontrado en los tomates, el licopeno, un carotenoide que además promueve la actividad antioxidante de nuestro organismo. Los antioxidantes pueden ayudar a prevenir las complicaciones de la enfermedad diabética así como la resistencia a la insulina. Así es que tomar jugo de tomate sin azúcar añadida puede ayudar a mantener niveles saludables de azúcar en sangre.