El proceso eleccionario de la Unión de Rugby de Tucumán (URT) llegó a su fin. Javier Budeguer, dirigente de Cardenales, y Carlos Marti Coll, representante de Jockey Club, fueron proclamado como la nueva cúpula de la entidad madre de rugby provincial.
La dupla obtuvo seis avales de los diferentes clubes afiliadas (Universitario, Lawn Tennis, Jockey Club, Cardenales, Lince y Bajo Hondo) en la Asamblea General Ordinaria y venció al binomio compuesto por Federico Caillou, de Los Tarcos, y Guillermo Meschwitz, de Huirapuca -sacaron cinco votos que correspondieron a Los Tarcos, Huirapuca, Corsarios, Natación y Gimnasia y Tucumán Rugby-.
Es importante mencionar que, durante el proceso eleccionario, cada club cuenta con un voto de manera individual y no existe un mecanismo establecido por el estatuto de la URT. “El ganador es el que obtiene la mitad más uno de los avales”, había explicado Santiago Taboada en la previa de las votaciones realizadas en la sede de la URT.
La elección presentó varias particularidades. La más destacada fue la participación de dos listas. Generalmente, la dirigencia del rugby provincial opta por el consenso entre los diferentes interesados en el cargo, por lo que, en la mayoría de las ocasiones, el presidente electo cuenta con el aval unánime de las 11 instituciones afiliadas. Cabe destacar que el resto de los clubes que participan en los torneos están bajo la figura de clubes invitados, lo que significa que no tienen voto durante la Asamblea General.
El hecho es curioso debido a que el único antecedente de la última década data de las elecciones de 2016. Pablo Garretón y Santiago Taboada eran los candidatos en aquella ocasión. La falta de consenso y la dilatación de aquella elección provocó que los titulares optarán por una tercera opción: Jorge Juárez Chico, el presidente de Lince de aquel momento. El dirigente del club de la Silvano Bores había recibido el apoyo unánime de todos los clubes habilitados a votar. José Mattalías, de Cardenales, fue elegido como vicepresidente, mientras que Francisco Landívar, de Jockey Club, ocupó el cargo de Secretario.
“Fue en diciembre del 2016 y mi mandato fue por dos años, como marca el estatuto de la Unión de Rugby de Tucumán”, dijo Juárez Chico en diálogo con LA GACETA en la previa a la renovación de autoridades.
La elección de 2024, a priori, siempre estuvo contemplada con dos listas. Según pudo averiguar LA GACETA, Taboada tenía pretensiones de renovar el cargo por el período de los próximos dos años, aunque a días de la presentación de las listas habría bajado su candidatura. Esta situación hizo que Budeguer tomase la posta y presentara una lista para enfrentar al binomio de Caillou-Meschwick.
“El rugby debe renovarse constantemente, la alternancia es importante. Se hizo una buena gestión y es momento de dejar lugar a otros”, había declarado Taboada en la previa a las elecciones.
La primera reunión de la asamblea fue convocada para el jueves 19. Ese día se aprobó la Memoria y el Balance del último año, y se procedió a un intenso debate sobre quién sería el próximo presidente de la URT. Sin acuerdo y con muchas dudas, la asamblea decidió pasar a un cuarto intermedio que se extendió hasta el jueves 26.
Las dos listas en contienda preveían una elección reñidas. El resultado final no sorprendió a ninguno de los protagonistas, debido a que ambos contaban con un gran apoyo por parte de las 11 instituciones que decidirían el futuro de la URT. Los primeros resultados se conocieron alrededor de las 22.
“Fue una semana muy estresante. Estuve muy nervioso, pero finalmente se definió. Ahora ya no hay dos listas. Tenemos que unirnos para hacer crecer al rugby tucumano. Contamos con mucho potencial para recuperar lo que alguna vez fuimos”, había declarado Budeguer después de la victoria.
La conformación del nuevo Consejo, en tanto, se definirá esta noche en la sede de la URT. Así la nueva dirigencia estará lista para afrontar el período 2024-2026.