El ex presidente Alberto Fernández solicitó a la Justicia el "reintegro inmediato" desde España a Argentina de su hijo, Francisco, de 2 años, al considerar que la madre y ex primera dama, Fabiola Yáñez, lo pone "en riesgo". En su presentación, advirtió que el menor pasó las fiestas de fin de año sin familia "mientras su madre festejaba bebiendo alcohol y disfrutando buenos platos" en un restaurante en Madrid.
“Vengo a dejar constancia de mi decisión de dejar sin efecto la autorización para que el niño resida en Madrid (autorización que vencerá indefectiblemente en abril próximo y que comunicaré a las autoridades migratorias españolas) y a solicitar que se arbitren las medidas pertinentes para que de inmediato el niño regrese a la Argentina y quede preservado por la custodia que se me ha asignado”, exigió el ex jefe de Estado.
Los fundamentos del reclamo de Alberto Fernández
Silvana Carreira, la abogada del ex presidente, presentó el escrito ante al juez Christian Brandoni Nonell, del juzgado Penal, Contravencional y de Faltas N° 20, en una causa en la interviene la fiscal Celia Rodríguez. En el reclamo, Fernández subrayó que Francisco pasó las Fiestas sin familia "mientras su madre festejaba bebiendo alcohol y disfrutando buenos platos" y aporta notas que muestran la cena de Año Nuevo en que se la vio a Yañez en un restaurante madrileño, según el padre, sin su hijo.
“Francisco, nuestro hijo, no estaba en la cena. No sé dónde estaba esa noche, ni quién lo cuidaba. Nuestro hijo no pudo celebrar las festividades junto a su padre por el deseo unilateral y arbitrario de su madre", cuestionó el ex presidente, quien fue denunciado por su ex pareja por violencia de género.
En este marco, el ex presidente sostuvo que Fabiola Yáñez “desarrolla su vida sin riesgo alguno”. Y agregó: “Si sintiera temor alguno, no se expondría a lugares públicos como lo hace. En esos términos no se entiende la necesidad de la custodia", evaluó y luego alertó: “Francisco, de tan solo dos años, sí está en riesgo, lejos de su centro de vida, de su familia y al cuidado de quién sabe Dios”.
Insistió en que la seguridad de su hijo “está en riesgo” y sentenció: “Su madre, mientras lleva a cabo múltiples viajes y participa en salidas nocturnas, deja a Francisco completamente desatendido o, en el mejor de los casos, bajo el cuidado de terceros ajenos, ya que en España no cuenta con familiares que puedan asumir dicha responsabilidad”.