El tercer mandato consecutivo de Nicolás Maduro ha desatado una ola de reacciones en todo el mundo. Líderes de la oposición venezolana, organismos internacionales y gobiernos extranjeros han rechazado su investidura, calificándola de ilegítima y denunciando un aumento en la represión política.
Desde Santo Domingo, Edmundo González Urrutia, presidente electo reconocido por 12 países, se dirigió al pueblo venezolano a través de un video difundido en redes sociales. “Maduro consuma su dictadura al autoproclamarse. Ha violentado la Constitución y se autocorona dictador”, afirmó tras la ceremonia del viernes.
González, quien aseguró haber obtenido el 70% de los votos en los comicios de julio, ordenó al alto mando militar desconocer las órdenes del régimen chavista. “Como comandante en jefe, instruyo a las Fuerzas Armadas a no obedecer órdenes ilegales. A los cuerpos policiales les ordeno el cese inmediato de la represión contra nuestro pueblo”, declaró.
El opositor explicó que no pudo regresar a Caracas debido al cierre del espacio aéreo y la activación de sistemas antiaéreos. “Buscaban hacer conmigo lo que hicieron contra María Corina Machado. Esto demuestra su cobardía y su falta de escrúpulos”, denunció.
Detención de Machado
Un día antes del juramento, la líder opositora fue detenida en Caracas por la Policía Nacional Bolivariana. Según denunció, fue interceptada por agentes armados tras liderar una marcha. “Me preguntaron mi nombre, me golpearon y me subieron a la fuerza en una moto. Así opera esta dictadura”, relató tras ser liberada.
Machado agradeció el apoyo del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien condenó su detención y calificó al régimen de Maduro como “un ejemplo de opresión brutal”. En un mensaje en redes sociales, Trump expresó: “Los líderes opositores como Machado y González Urrutia son la verdadera voz del pueblo venezolano”.
Condena del G7
El grupo de países del G7 emitió un comunicado rechazando la legitimidad de Maduro y denunciando las violaciones a los derechos humanos en Venezuela. “El régimen de Maduro demuestra un desprecio absoluto por la democracia y el Estado de derecho”, afirmó el documento firmado por Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos.
El bloque también criticó las detenciones arbitrarias, como la de Machado, y pidió una solución pacífica y democrática liderada por los propios venezolanos. “Seguimos comprometidos con apoyar al pueblo venezolano en su lucha por la libertad”, concluyó el comunicado.
Por su parte, la Unión Europea endureció las sanciones contra el chavismo. Londres incluyó a 15 funcionarios en su lista negra, mientras que Estados Unidos elevó la recompensa por la captura de Nicolás Maduro y Diosdado Cabello a 25 millones de dólares.
Más repercusiones
Los ecos de la investidura no sólo fueron diplomáticas. Miles de venezolanos protestaron en Caracas y en ciudades como Buenos Aires, Madrid y Bogotá. En respuesta, el gobierno de Maduro ordenó el cierre de las fronteras con Colombia y Brasil hasta el lunes 13 de enero, argumentando que buscaba evitar conspiraciones internacionales. La medida generó críticas por su impacto en la población y el comercio.