Cartas de lectores: El sector agropecuario

01 Febrero 2025

Pobre Bernardino Rivadavia: a los datos muy precisos sobre la situación del campo del lector García González (10/01), el lector Guardia Bosñak le respondió: “ah, pero Rivadavia” (23/01). El pobre prócer fue presidente apenas un poquito más de un año, y lo fue, ¡hace casi 200 años!, pero es suficiente para que sea, junto con Macri, el culpable de todos nuestros males. En realidad, Rivadavia, mediante la ley de enfiteusis, entregó tierras públicas por el término de 20 años, una especie de arrendamiento luego de los cuales el propietario las debía devolver al Estado. El problema es que 20 años después, ya no estaba Rivadavia; el que manejaba el poder total era don Juan Manuel de Rozas, quien autorizó que los arrendatarios se convirtieran en propietarios de la tierra; no hay que sorprenderse, porque el dictador era especialista en quedarse con tierras estatales; algo parecido ocurrió con las tierras fiscales del Calafate, pero con “otros próceres”. La historia del préstamo inglés tiene su explicación: en esa época el banco de Inglaterra era el que cobraba las tasas más bajas; el resto de los países de América pidieron créditos similares: Uruguay, Brasil, Chile, etc. La intención era utilizarlo para recuperar el puerto de Buenos Aires y para la fundación de pueblos en la frontera, pero entonces ocurrió la guerra con Brasil y ese dinero fue utilizado en los gastos del conflicto. Hay que advertir que ningún partido político contempla una reforma agraria en su plataforma; eso es así porque, realmente, no hay concentración de la tierra en pocas manos, tampoco hay una “extranjerización de la tierra argentina”. Estos temas son difíciles de desarrollar mediante cartas que el diario amablemente nos publica; yo les agradezco a los lectores porque de ellos aprendo, y espero que mis aportes sean también útiles.

Luis Ovidio Pérez Cleip

luisperezcleip@gmail.com

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