Cartas de lectores: Fernando Riera

El 6 de febrero se cumplen 110 años del nacimiento de Fernando Riera, en el hogar formado por Ángela Galtieri y Juan Riera. Fernando fue el segundo hijo de los diez que formaron su familia, entre los que se encontraban Angélica, quien fue religiosa de las hermanas de Nuestra Sra. Del Huerto, y de Lola, que contrajo matrimonio con Amado Juri, quien fue Gobernador de Tucumán (1973-1976). Fernando hizo sus estudios primarios en la Escuela Superior Bella Vista (hoy Escuela Manuel García Fernández) los estudios secundarios los realizó en el Colegio Nacional de Tucumán, debiendo finalizarlos en el Colegio Nacional de Aguilares, debido a una huelga estudiantil que paralizó las actividades del Colegio de Tucumán. Los estudios universitarios de Abogacía los cursó en la Facultad de Derecho de la UNT. Se inició en la vida política en el año 1943 después del golpe de Estado que destituyó al presidente Ramón Castillo. Él mismo lo relató, en la entrevista publicada en LA GACETA del 4 de septiembre de 1995: “con un grupo de jóvenes fundamos un ‘Centro Laborista’; hacíamos nacionalismo. En mis comienzos yo era más bien un muchacho de acción vecinal, consiguiendo entablar amistad con el entonces Interventor de Tucumán Dr. Alberto Baldrich. Esta amistad lo llevó de golpe a ofrecerme el puesto de Juez de Paz. Yo en ese entonces era estudiante de Derecho y luego fui elegido para presidir la Comisión de Higiene y Fomento (Hoy Municipalidad). Renuncié al cargo de Juez de Paz que era rentado por el otro que no lo era”. El 24 de febrero de 1945 fue electo diputado provincial, cargo que desempeñó hasta 1948 cuando el gobernador Carlos Domínguez lo designó ministro de Gobierno de la Provincia. El 1950 fue electo, por primera vez, Gobernador de Tucumán para el período 1950-1952. En 1952 fue elegido senador nacional por la Legislatura, cargo que desempeñó hasta el golpe de Estado de septiembre de 1955. Siendo gobernador, debió ser operado en Buenos Aires en el Instituto del Diagnóstico por cálculos a los riñones. Fue entonces que comenzó su amistad con Eva Perón quien lo visitó en su lecho de enfermo en varias oportunidades y fue ella y Juan Domingo Perón quienes le ofrecieron hacer su recuperación en la residencia de Olivos. Eva Perón, quien asistió al acto en el que Riera asumió su cargo de gobernador en 1950, estableció una sólida y afectuosa relación de amistad con Fernando Riera, lo que le llevó a expresar a viva voz en una reunión de gobernadores lo siguiente: “General, todos los gobernadores aquí presentes son tuyos, menos uno; el Gobernador de Tucumán es mío”. Producido el golpe de Estado que derrocó a Perón en 1955, Fernando Riera que era senador nacional fue encarcelado en la cárcel de Caseros en Villa Devoto durante dos años y medio, por razones meramente políticas, sin que se lo acusara de delito alguno. Durante su detención nunca se le tomó declaración alguna. En 1962, cuando el partido peronista se encontraba proscripto, fundó el Partido Acción Provinciana, del que fue candidato año gobernador, ganando la elección por amplio margen. Sin embargo, el gobierno nacional, presionado por el sector militar, anuló la elección, por lo que Riera no pudo ejercer el segundo mandato que le confirió el pueblo de Tucumán. En las elecciones del año 1963 fue elegido diputado nacional, cargo que desempeñó hasta el golpe de Estado el 28 de junio de 1966. En 1983 fue elegido, por tercera vez, Gobernador de Tucumán, cargo que desempeñó hasta 1987. En la Asamblea Legislativa reunida el 1 de abril de 1987 Fernando Riera se despidió de su vida pública expresando en esa oportunidad lo siguiente: “llego al final de mi vida pública tranquilo de conciencia y poniendo a Dios y a mis queridos padres muertos por testigo. Como consta en la declaración jurada de bienes presentada al asumir mis funciones no he acrecentado en un solo centavo mi patrimonio; fue norma de mi vida tal actitud que la profesé como imperativo insobornable de mi corazón”. Debemos destacar que Fernando Riera es el único tucumano elegido gobernador en tres oportunidades discontinuas (1950, 1962 y 1983). Ocupó el primer lugar en el peronismo de Tucumán durante 40 años, desde 1950 hasta 1987. Lo hizo en base a su tremenda honestidad, a su sencillez, a su austeridad. Fue un ejemplo moral que quedó grabado en el recuerdo de numerosas anécdotas de su vida. En los tiempos que vivimos, cuando los gobernantes terminan sus mandatos procesados judicialmente o encarcelados por sus actos de conducta que constituyen delitos, la figura de Fernando Riera se agiganta. Es por ello que al recordar los 110 años de su nacimiento su figura es un ejemplo a seguir por todos los que reciben del pueblo el mandato de representarlos.

Manuel Roberto Valeros
San Lorenzo 1.185 - S. M. de Tucumán