
Después de un entrenamiento, el cuerpo entra en una fase de recuperación en la que reparar los tejidos musculares y reponer energía es fundamental.
Existen diversas estrategias nutricionales que favorecen esta recuperación, incluyendo el consumo de proteínas, carbohidratos y antioxidantes.
¿Cuáles son los beneficios de consumir cúrcuma después de entrenar?
El compuesto activo de esta planta, la curcumina, fue objeto de diversas investigaciones que sugieren su capacidad para reducir el daño muscular tras el ejercicio.
Un estudio realizado por la Universidad de Lille, en Francia, analizó los efectos de la curcumina en combinación con la piperina, un compuesto presente en la pimienta negra que mejora su absorción.
Según los resultados, la ingesta de 6 gramos de curcumina y 60 mg de piperina, repartidos en tres dosis diarias, ayudó a reducir el daño muscular asociado a la actividad física. La reducción de estos síntomas podría favorecer una recuperación más rápida y efectiva.

No se recomienda el consumo de dosis altas de cúrcuma a largo plazo sin supervisión médica, ya que no hay suficiente evidencia sobre su seguridad a largo plazo.
La Organización Mundial de la Salud establece una ingesta diaria aceptable de 1,4 mg por cada medio kilo de peso corporal, aproximadamente 0-3 mg por kilogramo.
¿Qué otros alimentos se recomienda comer después de entrenar?
Nutrientes como la vitamina E, las proteínas y los carbohidratos desempeñan roles esenciales en el funcionamiento del cuerpo, desde la protección celular hasta la recuperación muscular.
La vitamina E es un nutriente esencial con un fuerte efecto antioxidante. Para asegurar una ingesta adecuada, se recomienda consumir alimentos ricos en ella, como:
-Frutos secos y semillas: almendras y semillas de girasol.
-Verduras de hoja verde: espinacas, acelga y brócoli.
-Aceites saludables: aceite de oliva extra virgen.
-Frutas: kiwi.
Las proteínas, en el contexto del ejercicio y el fitness, son indispensables para la recuperación y el crecimiento muscular. Las fuentes de proteínas incluyen opciones de origen animal y vegetal:
-Carnes: pollo, carne de res y cerdo.
-Pescados y mariscos: salmón, atún y camarones.
-Lácteos: leche, yogur y queso.
-Huevos.
-Legumbres: lentejas, garbanzos y porotos.
-Frutos secos y semillas: almendras, nueces, semillas de chía y girasol.
-Granos enteros: quinoa.
-Proteínas vegetales: tofu, tempeh y edamame.
Los carbohidratos son la principal fuente de energía del organismo y desempeñan un papel fundamental en la recuperación post ejercicio. Consumir carbohidratos dentro de las dos horas posteriores al entrenamiento ayuda a reponer las reservas de glucógeno, mejorando el rendimiento y reduciendo la fatiga.
Por su parte, las grasas saludables contribuyen al equilibrio hormonal y al bienestar general. Se pueden encontrar en alimentos como paltas, frutos secos, aceite de oliva y pescados grasos.