10 Febrero 2025
Perú ofrece destinos de ensueño para descubrir su faceta veraniega. Piura y Tumbes son dos regiones que cuentan con diversos balnearios y una variada oferta de hoteles que brindan una experiencia inolvidable al viajero.
Las aguas del Pacífico bañan las fascinantes playas de la región norte peruana. Se trata de una zona paradisíaca para compartir un buen momento de relax o de explosión de adrenalina.
Las playas de los departamentos de Piura y Tumbes son famosas por su arena clara, su mar cálido, sus deliciosos platillos marinos elaborados con insumos frescos, y por ofrecer la posibilidad de practicar todo tipo de actividades acuáticas.
Ambos destinos cuentan con una amplia y variada oferta hotelera y gastronómica, y están preparados para recibir durante todo el año a visitantes solos, o acompañados de familia y amigos.
Piura: un abanico de experiencias de sol y playa
Piura es el lugar donde el verano nunca termina. A casi una hora y media de vuelo desde Lima, este maravilloso destino, que se ha vuelto el preferido de muchos, brinda todas las comodidades y múltiples experiencias al viajero.
Uno de sus balnearios más conocidos es Vichayito, una playa perfecta para el descanso y desconectarse de la vida citadina. Varios de sus hospedajes cuentan con piscinas con vista al mar y tumbonas frente al océano. Además, sus aguas claras son perfectas para realizar actividades como buceo y snorkel, que permiten observar la vida marina. Los amantes de la adrenalina también tienen otras opciones, como realizar paddle board y kayak.
El Ñuro es otro balneario increíble de Piura. Muchos llegan a este destino no solo para disfrutar de relajantes caminatas en sus extensas playas o ver atardeceres de ensueño, sino también para apreciar el nado de tortugas marinas, una maravillosa actividad que nos acerca a la naturaleza y al mundo marino.
Máncora es una de las playas más conocidas de la región Piura. Muchos surfistas llegan a este balneario para correr sus olas. También es famoso por su amplia oferta de hoteles y restaurantes, y por tener una vibrante vida nocturna junto al mar.
Para homenajear al paladar no hay que dejar de probar el ceviche de mero o cualquier tipo de ceviche, sea de pescado o mariscos, que en Piura suele ir acompañado de sus clásicos y sabrosos chifles (láminas de plátano verde fritas) y zarandaja (un tipo de frijol).
Tumbes: vacaciones idílicas frente al océano Pacífico
Al norte de Piura, se encuentra otro fascinante destino de playa. Se trata del balneario de Punta Sal, en Tumbes, región ubicada al extremo norte del Perú, que está a casi dos horas de vuelo desde Lima. Sus aguas cálidas y su arena blanca, lo hacen propicio para el descanso y para aventurarse en un sinfín de actividades náuticas.
Si bien cuenta con una variada oferta de hospedajes, Punta Sal destaca por sus resorts con piscinas, servicios gastronómicos de primer nivel y variados shows nocturnos. Además, brindan masajes y diferentes experiencias wellness o de bienestar mientras el visitante disfruta de la brisa marina y una vista espectacular del océano Pacífico. Aquí también uno se puede aventurar a bucear bajo sus aguas, pasear en moto acuática, hacer kayak o incluso pescar.
Zorritos es otra playa muy conocida de Tumbes, que cuenta con una infraestructura hotelera perfecta para disfrutar de los días de sol. En este balneario también se pueden realizar múltiples actividades acuáticas, wellness y de entretenimiento como en Punta Sal. Por ello, también es una gran opción para quienes buscan un destino de playa en el que vivirán momentos que jamás olvidarán.
Para completar los días de playa en Tumbes, se recomienda probar su clásico ceviche de conchas negras, u otros platillos marinos como el célebre majarisco tumbesino, hecho a base de plátano frito y acompañado con salsa de mariscos al estilo norteño.
Cómo llegar
Desde las ciudades de Buenos Aires, Mendoza, Córdoba, Salta y Rosario se puede viajar vía aérea a Lima, un recorrido que dura unas cuatro horas y media. Desde la capital peruana salen vuelos a Piura y Tumbes, cuyo recorrido dura una hora y media y casi dos horas, respectivamente.
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