“Para la Unión Argentina de Rugby es un honor que Los Pumas tengan la oportunidad de enfrentar a los Springboks, los actuales campeones del mundo, en el mítico estadio de Twickenham, conocido como la 'Catedral del Rugby'. Agradecemos a World Rugby y SANZAAR por esta oportunidad, que representa un reconocimiento al crecimiento y al nivel de nuestro rugby, y nos ayuda a seguir fortaleciendo el desarrollo. Sin duda, será una experiencia inolvidable para nuestros jugadores y una gran oportunidad para mostrar nuestro rugby a todos los fans del mundo”, expresó Gabriel Travaglini, presidente de la UAR.
El comunicado que emitió la UAR sobre el duelo que se jugará el 4 de octubre es emotivo, sí, pero también hay que leerlo entre líneas. Pulgar hacia arriba para el romanticismo que genera, no solo en el rugby también en el mundo del espectáculo internacional (las estrellas de la música sueñan con cantar allí) y hasta en los Testigos de Jehová (suele ser sede de las convenciones), estar en ese imponente estadio. Pero el rugby en Argentina, con argentinos en las tribunas se vive de un modo único.
Esa unicidad habrá que ver si se consigue en una sede que, se la reconoce deslumbrante. Después de la experiencia, se sacará conclusiones, pero la razón tiene que ver más que nada por una cuestión económica valuada porque un partido con Argentina atrae cada vez más a los espectadores del rugby en general. Ceder la condición de local tiene otra motivación bien vista por los rivales, por más que sean campeones del mundo, que consideran a cualquier estadio de fútbol del país adaptado para el deporte de la ovalada, como un lugar dificilísimo de visitar.
Otro punto a favor que se puede sumar a todo eso del honor y privilegio, es que los rugbiers que están en las ligas de esa parte del mundo no tendrán que trasladarse los miles de kilómetros que implican jugar en Argentina.
El test match se disputará el sábado 4 de octubre en el estadio de Twickenham (ahora llamado Allianz Arena) desde las 14, hora local, las 10 en el país. Ese mismo día jugarán Australia-All Blacks. Garantizar suspenso hasta entonces y que el campeón no esté definido en esa última fecha, es imposible, pero sí es seguro que será un día inolvidable porque un equipo deportivo argentino será local en Inglaterra, algo que en el rugby ya tuvo un antecedente cuando Los Pumas jugaron la última fecha de locales en 2016 también en Twickenham contra Australia (perdieron 33-21).