26 Febrero 2025
A diferencia de los aires acondicionados convencionales, que utilizan refrigerantes y compresores, esta tecnología prescinde de esos elementos, disminuyendo su huella de carbono.
La alternativa al aire acondicionado más prometedora.
Pasar calor en el verano no es una opción, más cuando las temperaturas son cada vez más extremas, en consecuencia del calentamiento global que vuelve más sofocante la atmósfera. Ante esta situación, el aire acondicionado parece ser la única solución para refrigerar el lugar donde habitamos, pero su consumo masivo impacta tanto en el ambiente como en el bolsillo de los usuarios. Pero una alternativa pretende revolucionar el mercado y los sistemas de refrigeración.
Ante la demanda generalizada de los aires acondicionados y el consumo de energía cada vez más elevado, una innovadora tecnología francesa busca cambiar rotundamente el panorama con una alternativa sustentable que reduce tanto el gasto eléctrico como su huella en el medio ambiente. La solución: un sistema que no requiere de gas ni instalación de una unidad exterior.
Un sistema de enfriamiento sin gas ni unidad exterior
La startup francesa Caeli Énergie desarrolló un sistema de aire acondicionado que se basa en un método natural y eficiente, ofreciendo un enfriamiento efectivo con un consumo cinco veces menor que el de los aires acondicionados. La tecnología que utiliza es el llamado enfriamiento adiabático.
El enfriamiento adiabático, también conocido como enfriamiento por evaporación, se basa en un principio físico sencillo pero eficaz: la evaporación del agua absorbe calor del ambiente, disminuyendo la temperatura del aire. Para ello, el sistema hace pasar el aire a través de superficies húmedas o agua atomizada, lo que provoca una evaporación rápida que enfría el aire circundante.
Un menor impacto ambiental
El resultado es un enfriamiento eficiente que, dependiendo de la humedad y temperatura del ambiente, puede reducir entre 2º y 10º centígrados la temperatura del aire. Esto convierte al enfriamiento adiabático en una opción ideal para climas secos, aunque su efectividad puede verse reducida en zonas con altos niveles de humedad.Además del ahorro energético, este sistema contribuye a un consumo responsable del agua. Se estima que en un año, un hogar que utilice esta tecnología podría consumir alrededor de 1 metro cúbico de agua, una cifra significativamente menor comparada con otros sistemas de refrigeración tradicionales.
Los desafíos por superar
La empresa, fundada en 2020, aseguró casi 11 millones de dólares en financiamiento para seguir desarrollando esta alternativa ecológica a las unidades de aire acondicionado tradicionales, aunque no todos los desafíos fueron superados.
La tecnología todavía enfrenta algunos obstáculos. El costo inicial del sistema es más elevado en comparación con los aires acondicionados convencionales, con precios que rondan los 3.990 euros, pero el ahorro en el consumo eléctrico a largo plazo podría hacer que la inversión valga la pena.
Otro punto a mejorar es su rendimiento en ambientes húmedos. Si bien la tecnología ofrece excelentes resultados en climas secos, su eficacia disminuye cuando el aire ya contiene altos niveles de humedad. Por ello, los desarrolladores están explorando formas de optimizar el funcionamiento del sistema para adaptarlo a diferentes condiciones climáticas.
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