
El especialista Ezequiel Aráoz comentó que las posibilidades de recuperación del gomero del Cementerio del Oeste no son nulas, aunque aquello difícilmente ocurra debido a que su estructura probablemente esté afectada.
“No sería imposible que haya un pequeño rebrote, pero los árboles cuando empiezan con esta sintomatología son muy difíciles de rescatar”. El ecologista explicó que esto sucede por la forma en que los parásitos atacan a estos seres.
“Es muy frecuente que los árboles sean afectados por hongos, que son parásitos perfectos. Existen tratamientos, pero en árboles son muy difíciles de aplicar, porque estos vienen de las raíces. Aún si hubiera un método, es muy probable que la madera ya esté debilitada”, deslizó
Los indicios de que el esqueleto del árbol está debilitado están en las hojas. “Para que se produzca el desprendimiento tiene que haber una fuerza, algo que lo empuje. El árbol está perdiendo follaje. Típicamente asociado a la caída de hojas hay un proceso de degradación de la madera en la que pierde sus capacidades, y es cuando se empieza a podrir. A pesar de que tiene menos follaje el árbol, es decir, menos peso, lo mismo se desprende, ¿por qué? Porque está debilitada la madera”, aclaró Aráoz.
Así, el pronóstico del gomero parece llevar a procedimientos que solo empeorarían la situación. “Si se hiciera un tratamiento, es difícil revertir el daño que tiene la madera. De hecho se tendrían que hacer podas muy grandes para eliminar al árbol, que a su vez aceleran el proceso de entrada de nuevos patógenos”, detalló.
Y sumó: “Las podas son típicamente necesarias en muchos casos, pero son reconocidas como fuentes de entrada de patógenos en los árboles, por lo que aquellas que son drásticas tienen que reducirse al mínimo”. No obstante, Araóz agregó que el gomero necesita de una poda significativa.
Posibles soluciones
Esta sintomatología ha elevado las preocupaciones de los especialistas, quienes destacaron los riesgos que puede implicar mantener el preciado árbol.
“Un árbol se vuelve peligroso cuando además de presentar defectos se halla próximo a una zona de tránsito. Éste además de ser de gran porte y añoso, presenta defectos visibles y ya tiene antecedentes de fallos. Es un árbol peligroso y por la ubicación representa un alto riesgo para las personas. Aunque cueste aceptarlo, es riesgoso para las personas principalmente y bienes materiales”, lamentó Ángela Nieva.
De todas formas, la licenciada en Biología agregó que hay una solución más concesiva, aunque no puede asegurarse su efectividad. “Creo que existe una alternativa que dejaría contentos a todos, teniendo en cuenta el valor histórico del árbol: vallar y señalizar el perímetro del árbol para que si llega a fallar una rama o caer de raíz no ocasione ningún daño. Pero eso creo que funciona en una sociedad que respete los límites de vallado”, aconsejó
El debate sobre el mantenimiento o el retiro del gomero, que fue declarado “árbol notable” en 2004 por el Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán, es complejo, debido a su valor cultural, social e histórico, el cual ha marcado a muchos de los vecinos del barrio Don Bosco. Aunque su conservación, según los especialistas, podría representar un riesgo para quienes lo visitan.