19 Marzo 2025
“Estoy vacío, no tengo nada más para darle al club”, la declaración de Juan Román Riquelme, minutos antes de una final de Copa Libertadores en 2012 todavía hace ruido. Y el que se refirió a aquella final internacional fue Julio César Falcioni, técnico en aquel momento del “Xeneize”. “No, no sé... Tengo códigos, me los guardo para mí. Cada uno sabe lo que pasó, es así”, respondió cuando le consultaron si Boca se autoboicoteó en aquel partido decisivo.
“Hubo muchas situaciones en la previa a esa final: lo de Facu (Roncaglia), que habíamos combinado que iba a jugar y el día anterior ya no viajaba; una reunión de los muchachos en la previa del viaje pidiendo que viajara. No había sido una decisión mía, había sido institucional. Hubo un montón de situaciones que no dejaron tener una noche en paz y tranquila. No fue normal para jugar una final de Copa Libertadores”, señaló en referencia a la situación del zaguero central, quien había terminado su contrato y no se alcanzó una prórroga para que disputara ese compromiso.
En este sentido, profundizó sobre cómo el plantel transitó las horas previas a la final: “Cuando vas a jugar un partido tan trascendente tiene que haber armonía total. Algunos jugadores tuvieron la oportunidad de jugar finales, no a todos les pasa. Entonces, hay que estar en una armonía total entre el equipo, el cuerpo técnico y la dirigencia. Ese día no hubo”.
Por otro lado, se refirió a la famosa frase del “10”, cuando declaró que Falcioni lo hizo correr como un “boludo” y el DT recogió el guante: “Nunca hicimos correr a ningún jugador como un boludo. Los preparamos para que pudieran rendir de la mejor manera”. En consonancia, desde el programa marcaron que fue un quiebre en la relación, pero el Emperador lo objetó: “Siguió jugando, lo ponía cuando estaba bien”. “Jugó casi toda esa Copa Libertadores 2012, no tanto en la Copa Argentina y el campeonato. Ganamos los dos, la Libertadores no. A buen entendedor, pocas palabras”, sentenció.
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