Un nuevo sospechoso por el crimen del joven que intentó evitar un asalto

La División de Homicidios y el Ministerio Público Fiscal investigan a un joven de 18 años, sospechado de haber participado en el homicidio de Bruno Emanuel Vildoza luego de que este intentó evitar que asaltaran a una mujer en su barrio. El sospechoso estuvo demorado, pero fue liberado ante la falta de evidencias para convalidar su aprehensión.

El episodio ocurrió el viernes 28, alrededor de las 22.30. El joven de 25 años había salido de su casa ubicada en el barrio 130 Viviendas y se acercó al drugstore que funciona a pocos metros de su hogar. Mientras conversaba con el dueño del negocio una mujer estacionó una motocicleta al frente del local e instantáneamente llegaron dos sujetos que la amenazaron con un arma de fuego para sacarle el rodado. “Ella se asustó y como no se había bajado de la moto los ladrones voltearon el vehículo, provocando que ella y la bebé se cayeran. Bruno quiso acercarse a socorrerlas, los otros se subieron rápido a la moto, él quiso agarrar la moto para tirarla y el que iba atrás se dio la vuelta, le disparó y se fueron”, contó Yanet, hermana de la mujer asaltada en diálogo con LGPlay.

Fallecimiento

El dueño del drugstore auxilió a Bruno luego de que este recibió el impacto del proyectil, y lo llevó en su camioneta hacia el hospital Centro de Salud; pero falleció debido a un shock hipovolémico luego de que la bala atravesara su pulmón izquierdo y grandes vasos por encima del corazón.

El lunes la Fiscalía de Homicidios I que dirige Pedro Gallo formuló cargos en contra de Axel Gabriel Schell (19) y lo acusó de ser coautor del delito de homicidio en ocasión de robo. Durante la audiencia, la auxiliar de fiscal María José Agüero expuso la teoría del caso y las evidencias recolectadas hasta el momento y solicitó que Schell fuera sometido a tres meses de prisión preventiva. Para argumentar el pedido de la medida de mayor intensidad explicó que el imputado podría entorpecer el procedimiento, especialmente al tener en cuenta que hay una persona prófuga, y que también podría darse a la fuga. El juez interviniente hizo lugar a su requerimiento.

Durante el fin de semana, los policías de la Dirección General de Investigaciones Criminales y Delitos Complejos, siguiendo órdenes de los comisarios Juana Estequiño y Diego Bernachi, realizaron ocho allanamientos a lo largo de la Capital en los cuales incautaron elementos de interés para investigación, entre ellos un arma de fuego. También aprehendieron a una persona de 18 años que podría estar involucrada en el crimen. Fuentes cercanas a la investigación contaron que algunos testigos lo señalaron como el otro participante y lo vincularon con Schell en otros robos que cometieron con anterioridad.

El joven estuvo demorado durante seis horas, pero ante la falta de elementos suficientes para solicitar las medidas privativas quedó en libertad. No obstante los investigadores están avanzando en la pesquisa y analizando los videos capturados por las cámaras de seguridad y el examen telefónico para que el fiscal pueda disponer la aprehensión correspondiente y su futura imputación.

Daniela, la pareja de Bruno, sostuvo que no serían solo dos asaltantes, sino que habría más involucrados. “Supuestamente ellos bajaron de un auto en una esquina y ahí iban cinco personas más. Le pido al fiscal y al ministro de Seguridad (Eugenio Agüero Gamboa) que busquen porque no es uno solo, son muchos los que están en esta causa y no quiero que quede en la nada”, dijo.

Reclamos

El hecho conmocionó y enfureció a los vecinos del barrio 130 Viviendas, que se quejaron por la falta de seguridad en la zona. “Estamos a la deriva, acá no entra la policía, están cinco minutos y se va. Esa noche estuvimos entre 40 minutos y una hora esperando a que vengan a ver qué había pasado”, contó Yanet. “Cada vez que uno llama nunca aparecen. No entran ambulancias, no entran autos particulares por la inseguridad y el miedo”, agregó Daniela.

“Estamos abandonados por la policía. Si llamás los fines de semana al 911 cuando te atienden dicen que no tienen móviles para venir aquí. Los de la comisaría 10° ni aparecieron para preguntar cómo estamos. Acá estamos totalmente desprotegidos; después del viernes a la medianoche esto es tierra de nadie”, finalizó un vecino de la cuadra.