
Tras la jornada de sábado, los pilotos y los equipos se fueron del circuito de Suzuka, con la certeza de que la carrera final por la tercera fecha de la Fórmula1 no sería en seco total. Las previsiones climáticas para esa parte de Japón, al noreste de la prefectura de Mie, se cumplieron: comenzó a llover en la madrugada y seguirá así hasta la hora del comienzo de la carrera.
Luego, siempre basado en las previsiones, baja radicalmente la probabilidad y se abre incluso una ventana de posible sol alternando con nubes. Dominar una pista entre lo mojado y lo seco sería a lo que los pilotos se enfrentarán.
La parte positiva
La lluvia podría ayudar a terminar con los incendios del césped. Las precipitaciones humedecieron el pasto por lo que, al menos por ello, no se producirán las interrupciones causadas por los incendios. En total, los focos de fuego en sectores reducidos del circuito de Suzuka fueron cinco que obligaron a hacer flamear la bandera roja y detener las acciones.
Entre las explicaciones que encontró la Federación Internacional de Automovilismo, la causa de los incendios, se encuentra en las chispas que salen de las planchas de titanio de los autos y caen sobre el pasto que está por demás seco. Por lo tanto, las lluvias podrían ser la solución al inconveniente.
Asà está Suzuka en estos momentos
— El Mejor del Resto (@elmejordelresto) April 6, 2025
Faltan poco menos de 4hs para la carrera.#F1 #JapaneseGP ð¯ðµ
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