18 Abril 2025
Errores que podrías estar cometiendo al lavarte los dientes.
Cepillarse los dientes es una tarea que de tanto repetirla la hacemos automáticamente. A lo largo de la vida pasamos alrededor de 82 días limpiándo estos órganos, por lo que ya tenemos bastante incorporado este mecanismo. Pero lo cierto es que, incluso con tanto conocimiento sobre la materia, podríamos estar ignorando graves errores que dañarían la salud.
Lavarse los dientes no solo previene caries y puede evitar un dolor de muelas. Esta actividad de higiene tiene repercusiones mucho más importantes en nuestra salud en general, incluso desempeñando un papel importante en la reducción del riesgo de enfermedades cardíacas, demencia e infecciones respiratorias como la neumonía.
La relevancia que tiene este acto cotidiano para nuestra salud hace necesario conocer de qué manera lavarse correctamente los dientes y cuáles son los errores que cometemos a la hora de higienizarnos. Según la Dra Smita Mehra, dentista principal de The Neem Tree Dental Practices, consultada por el medio Newsweek, estas son las equivocaciones que no percibimos a la hora de cepillarnos.
Los errores que no advertirnos al cepillarnos diariamente
Error uno: Usar pasta dental blanqueadora todos los días
Las pastas blanqueadoras pueden parecer inofensivas, pero su uso diario desgasta el esmalte y puede causar sensibilidad dental. Esto se debe a que contienen peróxido de hidrógeno, un químico abrasivo que, con el tiempo, debilita la superficie de los dientes.
La recomendación es alternar su uso o buscar versiones menos agresivas. Lo ideal es consultar al odontólogo para elegir la pasta adecuada según las necesidades de cada boca.
Error dos: Cepillarse justo después de comer o tomar bebidas ácidas
Cepillarse inmediatamente luego de consumir alimentos o bebidas ácidas puede ser perjudicial. El ácido reblandece el esmalte y, si se cepilla en ese momento, se corre el riesgo de erosionarlo aún más.
Es preferible esperar entre 30 minutos y una hora para que el pH de la boca se estabilice. Durante ese tiempo, se puede enjuagar con agua o masticar chicle sin azúcar para estimular la saliva, que protege naturalmente los dientes.
Error tres: Aplicar demasiada fuerza al cepillar
Muchos creen que cepillar con fuerza garantiza una mejor limpieza, pero lo cierto es que esto puede retraer las encías y desgastar el esmalte. Con el tiempo, este hábito genera sensibilidad y deja expuestas zonas vulnerables.
La técnica es más importante que la fuerza. Se aconseja usar un cepillo de cerdas suaves y hacer movimientos circulares, suaves y controlados.
Error cuatro: Mojar el cepillo antes de aplicar la pasta
Mojar el cepillo antes de poner la pasta parece una costumbre inofensiva, pero en realidad puede reducir la eficacia del dentífrico. Al agregar agua, se diluye la pasta y se pierde parte de su efecto limpiador y protector.
Lo mejor es usar el cepillo seco y dejar que la humedad natural de la boca active la pasta. Así se aprovechan mejor sus componentes.
Error cinco: Saltarse el cepillado nocturno
Omitir el cepillado antes de dormir es uno de los errores más perjudiciales. Durante la noche, la producción de saliva disminuye, lo que deja a los dientes más expuestos a la acción de bacterias y ácidos.
Sin una limpieza adecuada, se acumula placa y aumentan las probabilidades de caries y enfermedades en las encías. El cepillado nocturno es clave para mantener la salud bucal.
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