29 Abril 2025
Julia Rojkyn y su compañera controlan habitualmente el estacionamiento del supermercado en el que trabajan.
Por si todavía quedaban dudas sobre la existencia de personas honestas, un episodio en Entre Ríos graficó la respuesta. Dos trabajadoras encontraron en una playa de estacionamiento un bolso con un botín que no esperaban: $18 millones. Para su suerte, el dueño pudo recuperarlo y les dejó una recompensa que generó risas y críticas por igual.
Juli Rojkyn trabaja en un supermercado de Paraná, la ciudad entrerriana que limita con Santa Fe. En una ronda habitual al finalizar su trabajo, salió a caminar por la playa de estacionamiento del local para asegurarse de que no había nada fuera de lugar. Al llegar a uno de los autos que estaban estacionados, se encontraron con una sorpresa.
Encontraron $18 millones y los devolvieron
La mujer contó a los medios entrerrianos que un cliente llegó y dejó su auto estacionado en el supermercado. Lo que él nunca hubiera pensado era que se olvidaría una cuantiosa suma de dinero en el techo del vehículo y, mucho menos, que podría recuperar esa cantidad de dinero.
En cuanto vieron el maletín, Rojkyn y su compañera lo llevaron a la garita de seguridad. “Cuando lo abrimos para ver si había algún DNI, algo que identifique a la persona, vimos que había plata. Mucho dinero. Enseguida llamé a mi hermano para ver cómo manejábamos la situación y me dijo que llame a la policía para ver cómo nos ayudaban”, relató la trabajadora.
Pero, sin necesidad de que el maletín quedara a cargo de la policía, el cliente regresó asustado. “Como a los 40 minutos apareció el señor bastante movilizado, buscando un maletín. Le pedí características, le pregunté qué tenía adentro para ver si realmente era de él. Lo describió tal cual así que se lo devolví”, contó Julia en un móvil.
También relató que, al momento de guardar el maletín, nadie sabía con certeza de cuánto dinero se trataba, hasta que al reencontrarse con su dueño, se enteraron de que dentro de ese portaequipajes había nada menos que $18 millones. “Fue muy shockeante”, aseguró Rojkyn sobre la experiencia.
Luego de recuperar sus millones, el cliente les agradeció y se retiró. Pero más tarde regresó con un presente para las dos trabajadoras. “Nos dejó unos chocolates ‘Bon o Bon’. No hacía falta que nos dé nada porque fue nuestro gesto, es lo que corresponde, ese dinero no era nuestro. Pero no nos tenía que haber dado nada. Es nuestro trabajo”, reflexionó Julia.
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