Las personas que consideren tener una buena relación con sus jefes se sentirán afortunadas después de conocer el informe que elaboró Bumeran y replicó Forbes. Según el artículo de la revista, la tendencia sigue enfrentando a empleados con jefes y el conflicto está más caliente que nunca.
El portal de empleo y reclutamiento en línea Bumeran realizó la encuesta “Líderes o Jefes” de la cual se desprendió un dato negativo sobre las relaciones laborales. La empresa asegura que más de siete de cada 10 personas en Argentina pensaron en abandonar sus trabajos. En total, un 77% lo consideró, un aumento de siete puntos porcentuales respecto a 2024.
La situación laboral en América Latina
La insatisfacción de los trabajadores con quienes ocupan cargos superiores en sus áreas laborales no es exclusiva de Argentina. Sucede que el mismo estudio se realizó en toda América Latina y los resultados fueron igualmente alarmantes.
En Chile las encuestas arrojaron un valor incluso superior al de Argentina: el 83% de las personas admitió haber considerado dejar un puesto por complicaciones con sus superiores. Apenas por debajo de Argentina se encuentra Ecuador, donde el porcentaje estaría situado en el 72% y Panamá y Perú, con un 71% de trabajadores pensando en un abandono por sus jefes.
Relación entre empleadores y trabajadores
Otro dato negativo que creció en Argentina fue el de la percepción que tienen los empleados de sus superiores. Según Bumeran, el 64% de las personas no considera que sus jefes asuman roles de liderazgo, lo que puede indicar una incapacidad para reconocer autoridad o una incapacidad por parte de los directivos de llevar adelante grupos de trabajo.
Por otra parte, más de la mitad de los encuestados en diferentes países aseguró tener una mala relación o una relación regular con sus superiores. Solamente el 48% consideró tener un vínculo bueno o muy bueno. Este último dato descendió nueve puntos respecto al porcentaje que se había obtenido el año pasado.
Los que consideran tener peor suerte con sus jefes asegura en un 50% que sus necesidades no son atendidas ni escuchadas; en contrapartida, hay un 64% que dice valorar las habilidades de escucha, contención y preocupación por el desarrollo profesional.
























