En la década del noventa, Argentina no solo se transformaba bajo la presidencia de Carlos Menem, sino que también se abría a fenómenos que fusionaban la política con lo esotérico. La figura de la "bruja presidencial" capturó la imaginación pública, generando tanto fascinación como controversia luegodela serie del presidente, sin embargo podría haber una segunda bruja. Este personaje no solo era un rumor, sino que tuvo su momento en los medios de la epoca, revelando detalles íntimos y predicciones audaces.
Una de estas reveladoras entrevistas televisivas de 1990 nos sumerge en el mundo de una vidente que aseguraba tener contacto directo con el entonces presidente. El diálogo no solo ofreció un vistazo a las "predicciones más locas" que rodearon al riojano, sino que también puso de manifiesto la intrigante relación entre el poder político y las creencias místicas.
La historia de la otra bruja de Menem
Una de las figuras que se autodenominaba "bruja buena", astróloga y tarotista vinculada al presidente Carlos Menem era Hilda, quien también se identificaba con el nombre de Evelia. Con 51 años de edad, Hilda se presentaba como una persona que amaba y respetaba profundamente la vida. Ella explicaba que el término "bruja" era utilizado en un sentido popular y cariñoso, abarcando sus habilidades como astróloga y lectora de tarot.
Sin embargo, la historia nos revela que la figura de la "bruja" de Carlos Menem no se limitaba a una única persona, siendo Azucena Agüero Blanch otra figura central. Conocida popularmente como "la bruja del poder", Azucena fue descrita como amante, consejera y confidente del expresidente, ganándose su total confianza. Carlos Menem mismo llegó a admitir que ella lo ayudó a tomar decisiones trascendentales, lo que subraya su influencia real en la toma de decisiones de Estado.
La presencia de estas figuras, como Hilda y Azucena Agüero Blanch, en el entorno de Menem no fue un hecho aislado, sino que remite a una tradición en el folclore político argentino. Esta tradición implica la consulta a videntes, curanderos o figuras espirituales en momentos de crisis o para decisiones importantes, mostrando cómo lo irracional o simbólico podía entrelazarse con las altas esferas del poder.
La entrevista televisiva de la segunda vidente de Menem
En la entrevista televisiva de 1990, disponible como una pieza de archivo en youtube, Hilda se presenta como una "bruja, tarotista vidente del presidente Carlos Menem". Relata que conoció al entonces presidente Menem muchos años atrás, durante una reunión donde se hablaba del General Perón. Fue en ese contexto que ella realizó una de sus primeras predicciones significativas, captando la atención del futuro mandatario.
Una de las predicciones más impactantes de Hilda fue sobre el General Perón, afirmando que "el General va a venir a la Argentina, tiene otra presidencia más, él va a morir en su país". Posteriormente, predijo que "aquel riojano", refiriéndose a Carlos Menem, sería el primer presidente justicialista elegido por el pueblo después del General Perón. El cumplimiento de estas visiones, según Hilda, llevó al presidente a creer y tener ganas de creer en sus habilidades.
La influencia de Hilda, según ella, no se limitaba a la esfera nacional, ya que afirmó que atendía y seguía atendiendo a muchísima gente, incluso por carta, a personas que solicitaban "revoluciones solares" desde otros países como Italia, España, Estados Unidos y Brasil. No obstante, por respeto a la privacidad de sus clientes, se negó a revelar nombres. En cuanto a la visión de Menem para el país, aclaró que no lo consideraba "el hombre de la Argentina gloriosa", sino más bien "el hombre de la Argentina que lucha por cambiar estructuras".





















