El horóscopo alquimista —también conocido como horóscopo alquímico— es un sistema esotérico poco difundido que combina la numerología con la energía de los metales. Según esta creencia, cada persona nace bajo la influencia de un metal, que determina aspectos de su personalidad, su destino y hasta qué vibras lo acompañan en distintos momentos de su vida.
Cómo calcular tu signo en el horóscopo alquimista
Para descubrir cuál es tu signo en el horóscopo alquímico solo tenés que seguir dos métodos sencillos:
Reducir tu fecha de nacimiento a un solo dígito.
Ejemplo: 9 de abril de 1993
0+9+0+4+1+9+9+3 = 35 → 3+5 = 8
Tu metal sería el Níquel.
Calcular la influencia metálica del año.
Se suman día y mes de nacimiento, pero se reemplaza el año de nacimiento por el año en curso.
Si el resultado da un número terminado en 0 (10, 20, 30, etc.), el metal que rige ese año es Cobre.
De esta manera, cada persona tiene un metal “esencial” y también una energía metálica que lo influye según el ciclo anual.
Signos del horóscopo alquímico y sus metales
1 = Plata: enérgicos, vitales, líderes natos y seductores.
2 = Hierro: dinámicos, confrontativos, sinceros y caprichosos.
3 = Mercurio: sociables, elocuentes, grandes comunicadores.
4 = Zinc: alegres, trabajadores, responsables y justos.
5 = Estaño: optimistas, curiosos, inquietos y dispersos.
6 = Plomo: tímidos, generosos, protectores y familiares.
7 = Platino: intensos, intelectuales, misteriosos e introspectivos.
8 = Níquel: astutos, líderes, ambiciosos y determinados.
9 = Oro: encantadores, exitosos, brillan con luz propia.
0 = Cobre: personas duales, sensibles, obstinadas y cambiantes.
Un horóscopo poco conocido, pero con raíces antiguas
El horóscopo alquimista se remonta a creencias ancestrales, cuando se pensaba que los metales guardaban energías ocultas capaces de influir en la vida de las personas. Aunque no es tan popular como la astrología tradicional, cada vez más personas lo consultan como una herramienta de autoconocimiento y búsqueda espiritual.






















