La condena contra Cerisola: “Un precedente contra la impunidad en la UNT”

Análisis del querellante en el fallo de la causa por los fondos mineros.

Juan Alberto Cerisola. Juan Alberto Cerisola.

La condena contra el ex rector de la Universidad Nacional de Tucumán Juan Alberto Cerisola, en el marco de los destinos que se le dieron a los fondos provenientes de YMAD, tuvo una enorme repercusión en el ámbito universitario. Quien fuera la cabeza de la Casa de Altos Estudios entre 2006 y 2014 fue sentenciado por el Tribunal Oral Federal a tres años y seis meses de prisión por defraudación contra la administración pública en perjuicio de la UNT y por incumplimiento de los deberes de funcionario público. Además, los jueces condenaron a otros dos ex funcionarios: Olga Cudmani, a tres años y dos meses de prisión, y Osvaldo Venturino, a dos años de prisión en suspenso. En tanto, otro de los imputados, Luis Sacca, fue absuelto por el beneficio de la duda. .

Al respecto, la Universidad Nacional de Tucumán, que conduce Sergio Pagani, ratificó su postura de “no dejar impune ningún acto de corrupción”. La voz de la institución estuvo representada por el abogado Patricio Esperguín, quien ofició como querellante en el debate oral. “El juicio marcó una bisagra en la historia de la Universidad. La UNT decidió pararse frente a hechos de suma gravedad institucional y sostener una acusación aun cuando los imputados habían sido sus propias autoridades”, señaló Esperguín en charla con LA GACETA, al analizar el alcance de la sentencia. Subrayó que la decisión del Consejo Superior de constituirse en parte acusadora fue “ejemplificadora” y que “la Universidad ha cumplido con la sociedad al no dejar pasar conductas que fueron calificadas como actos de corrupción”.

Esperguín remarcó que “la Universidad asumió un gran compromiso institucional” al sostener la acusación. En este sentido, sostuvo que la condena “se vislumbra en línea con las normas internacionales contra la corrupción” .

Consultado sobre la dificultad de acusar a ex autoridades universitarias, Esperguín admitió que “no fue fácil, porque se trataba de personal jerárquico y de un ex rector”. Sin embargo, insistió en que “la universidad no podía dejar impune actos de esta magnitud” y que la querella se sostuvo “con la firmeza de una decisión institucional respaldada por el Consejo Superior”.

Sobre la absolución de Sacca, el abogado aclaró que “no fue por inexistencia de pruebas, sino por el beneficio de la duda”. “Eso refuerza la posición de la universidad en cuanto a que había razones para litigar. Cuando tengamos los fundamentos, evaluaremos si corresponde interponer un recurso de casación”, adelantó.

Aprendizaje hacia adentro

El letrado también remarcó que este caso deja un aprendizaje hacia adentro y hacia afuera de la institución: “Muchos creen que cuando hay corrupción en una Universidad, toda la Universidad está contaminada. Eso es falso. Las instituciones están conformadas por personas, y son esas personas las que pueden delinquir. Lo importante es que la institución diga basta y separe lo que está bien de lo que está mal. En este sentido, la UNT fue clara y categórica”.

“Si la Universidad, con todo lo que significa, se anima a denunciar y a llevar a juicio a quienes la condujeron, quiere decir que nadie está por encima de la ley. Ese es el valor de este proceso”.

Además, sostuvo que el fallo servirá como un precedente dentro de la vida democrática universitaria: “Este proceso fue doloroso, porque tocó fibras sensibles de la comunidad académica. Pero también fue necesario. Sentó un ejemplo de que la transparencia y la ética deben estar por encima de cualquier nombre o cargo. Ese es el camino que debe seguir toda institución que se precie de ser democrática”.

Finalmente, Esperguín informó que ya elevó un reporte al Consejo Superior, donde explicó los alcances inmediatos del fallo.

Cerisola y Cudmani: por ahora no quedarán detenidos

El Código Penal indica que los delitos con penas mayores a tres años de prisión son de cumplimiento efectivo. Por eso, de confirmarse. Juan Alberto Cerisola y Olga Cudmani podrían ser detenidos, algo que el martes los jueces rechazaron a pesar de que la fiscalía y la querella habían pedido la prisión preventiva. La causa pasaría a la Cámara y luego a la Corte, por lo que una resolución podría estar lejos. Incluso, por la edad, si se confirma el fallo, ambos podrían ser beneficiados con la prisión domiciliaria.

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