Prohíben en Europa un tipo de esmaltes semipermanentes por su impacto en la salud

La Unión Europea vetó un componente presente en un cuarto de los productos, por sus riesgos para la fertilidad y la reproducción. Otras alternativas seguras ya están disponibles.

EN EUROPA. A partir del 1 de septiembre, los salones y tiendas deben retirar los productos con TPO. / PEXELS EN EUROPA. A partir del 1 de septiembre, los salones y tiendas deben retirar los productos con TPO. / PEXELS
09 Septiembre 2025

Para muchas personas, el esmalte semipermanente se convirtió en un producto imprescindible de la rutina de belleza. Sin embargo, existe una gran preocupación acerca de sus efectos en la salud reproductiva y, desde el 1 de septiembre de 2025, su fórmula más extendida cambiará por completo en Europa. Ocurre que la Unión Europea (UE) prohibió el TPO (óxido de trimetilbenzoyl difenilfosfina), un químico presente en aproximadamente un 25% de los esmaltes del mercado, por sus riesgos para la fertilidad y la concepción.

El antecedente europeo puede determinar un curso de acción en otros países, como la Argentina, donde no existe aún la prohibición. El control de la salubridad de los esmaltes depende de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología (Anmat). Se espera que la decisión de la UE incida en el consumo a favor de variantes que no contengan el químico vedado.

La posición de la UE forma parte del Reglamento Omnibus VII, que elimina de los cosméticos cualquier sustancia catalogada como cancerígena, mutagénica o tóxica para la reproducción (CMR). Aunque los estudios en seres humanos son limitados, la evidencia en animales muestra alteraciones en órganos reproductores y problemas de fertilidad. Bruselas decidió actuar de manera inmediata, prohibiendo la fabricación, importación, venta y uso de esmaltes con TPO, sin prórrogas ni excepciones.

Qué significa esto

Los principales afectados son los profesionales de la estética, quienes manipulan estos productos a diario en espacios que a menudo carecen de ventilación adecuada. Para las clientas, el riesgo es mínimo, dado que el producto se polimeriza bajo lámpara UV sobre la uña, pero la exposición repetida de las esteticistas es preocupante. La medida obliga a los salones y tiendas a retirar cualquier stock con TPO, lo que supone un golpe económico para muchos negocios pequeños.

La industria de la manicura ve en esta prohibición una oportunidad para profesionalizar el sector y priorizar la seguridad de quienes trabajan y consumen estos productos. Los salones ya se adaptan y los usuarios pueden acceder a fórmulas modernas, seguras y sostenibles que no comprometen el resultado final.

Las alternativas

Varias marcas ya ofrecían líneas libres de TPO, y los laboratorios desarrollaron alternativas seguras que mantienen la durabilidad y el brillo. Entre las opciones destacan:

TPO-L y acrilatos seguros: fotoiniciadores menos controvertidos que cumplen la función del TPO sin riesgos CMR.

Esmaltes de origen vegetal: elaborados a partir de maíz, yuca o caña de azúcar, más sostenibles y seguros.

Geles “peel-off”: de marcas como OPI, Essie o Bio Seaweed Gel, que duran hasta dos semanas sin necesidad de lámpara UV.

Técnicas de manicura japonesa: pulen y nutren la uña para un acabado natural y saludable.

Dip Powder y Popit Gel: sistemas que permiten color y resistencia sin recurrir al TPO ni a moléculas problemáticas.

Lo que se ve como rutina de belleza puede implicar riesgos invisibles. Europa apuesta por la precaución, y las consumidoras y profesionales tienen ahora la posibilidad de disfrutar de uñas pintadas sin comprometer su salud.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios