Argentina, entre los países que más consumen medicina estética en el mundo

El país ocupa el 5º lugar global en la aplicación de ácido hialurónico y se consolida como referente en tratamientos no quirúrgicos.

ÁCIDO HIALURÓNICO. Estas inyecciones tienen consecuencias que se están descubriendo en la actualidad./PINTEREST ÁCIDO HIALURÓNICO. Estas inyecciones tienen consecuencias que se están descubriendo en la actualidad./PINTEREST
22 Octubre 2025

Argentina se posiciona entre los países con mayor consumo de medicina estética a nivel mundial, especialmente en procedimientos no quirúrgicos y mínimamente invasivos. Así lo revela un informe de la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS), que destaca al país en los primeros lugares de las estadísticas globales.

Según el estudio, Argentina ocupa el 5.º puesto en aplicación de ácido hialurónico, con 233.250 procedimientos, lo que representa el 4,2% del total mundial. En el caso de la hidroxiapatita de calcio, figura en el 6.º lugar, con más de 48.094 aplicaciones, mientras que con la toxina botulínica -más conocida como bótox- alcanza 208.277 intervenciones, equivalentes al 2,3% del total global.

Una cultura estética arraigada

Las razones detrás de este fenómeno combinan tradición, innovación y acceso profesional. “Argentina siempre ha tenido una fuerte tradición en materia de belleza, estética y cuidado de la imagen, y esto se refleja en la demanda constante de tratamientos faciales y corporales”, explicó Diego Martínez, CEO de PH, distribuidor oficial en el país de la marca brasileña Rennova.

El especialista destacó que las técnicas mínimamente invasivas ofrecen resultados rápidos, visibles y con menor tiempo de recuperación, a diferencia de las cirugías plásticas tradicionales. “El acceso a profesionales altamente calificados y la constante innovación tecnológica hacen que el país se destaque como un mercado competitivo y confiable en este ámbito”, agregó.

Armonización y rejuvenecimiento: los efectos más buscados

Los tratamientos más elegidos tienen como eje la armonización facial, la prevención del envejecimiento y la revitalización de la piel.

El ácido hialurónico se utiliza para hidratar profundamente, aportar volumen y suavizar arrugas de manera natural.

La hidroxiapatita de calcio actúa como bioestimulador del colágeno, mejorando la firmeza y textura de la piel.

La toxina botulínica (bótox) relaja los músculos responsables de las líneas de expresión, logrando un aspecto más descansado y juvenil.

Desde Rennova explicaron que estos procedimientos se han vuelto populares por su comodidad y resultados naturales. “La mayoría de los pacientes puede retomar su vida cotidiana inmediatamente después de aplicarlos. Además, ofrecen efectos progresivos y adaptables a las necesidades específicas de cada persona”, detallaron.

Prevención y diagnóstico personalizado

Iniciar con estos tratamientos depende más de las necesidades individuales que de la edad. En muchos casos, se recomienda comenzar con toxina botulínica a partir de los 25 o 30 años, como método preventivo contra arrugas profundas. El ácido hialurónico suele aplicarse desde los 30 o 35 años para mantener la hidratación y el volumen, mientras que la hidroxiapatita de calcio es más frecuente en pieles maduras que buscan recuperar firmeza.

La clave, subrayan los especialistas, está en un diagnóstico profesional que determine el tratamiento más adecuado para cada paciente.

Seguridad y regulación, desafíos del sector

En paralelo al crecimiento del mercado, también aumentan las prácticas no reguladas, que ponen en riesgo la salud. Los expertos advierten que acudir a médicos estéticos habilitados garantiza el uso de productos aprobados y técnicas seguras, reduciendo complicaciones y maximizando resultados.

La medicina estética argentina atraviesa un proceso de expansión sostenida, impulsado por la demanda interna y el reconocimiento internacional. En un país donde la imagen personal forma parte de la identidad cultural, las nuevas tecnologías y los tratamientos no invasivos consolidan una tendencia que, lejos de ser pasajera, marca el futuro del bienestar y la belleza consciente.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios