BANDANA.
El conflicto dentro de Bandana volvió a ocupar el centro de la escena mediática. Tras las recientes declaraciones de Lissa Vera, quien aseguró sentirse desplazada por sus compañeras y lamentó la ruptura de los códigos internos del grupo, Valeria Gastaldi salió a responder con firmeza y puso en duda la versión de la cantante. El intercambio de acusaciones mantiene en vilo a los seguidores y abre nuevos interrogantes sobre el futuro de la banda pop más emblemática de los 2000.
La tensión quedó planteada cuando Vera sostuvo públicamente que sus compañeras “le soltaron la mano” y que los problemas personales del grupo “se filtraron a los medios”, algo que -según remarcó- nunca había ocurrido. “Lo que pasa en Bandana queda en Bandana, siempre fue así para mí. Y ahora los códigos se están empezando a romper”, afirmó en una entrevista que encendió la polémica.
Invitada por Ángel de Brito a #ÁngelResponde, por Bondi, Valeria Gastaldi replicó con un tono directo y sin rodeos. Mientras escuchaba las declaraciones de Vera, no ocultó su sorpresa y expresó su desconcierto con gestos visibles: “Pongo caras porque es todo un despelote. O sea, nos encontramos en el ensayo, está todo bien y de repente, explosiones por todos lados”. Según relató, el último encuentro antes del estallido había transcurrido con total normalidad, incluso con muestras de cariño, hasta que las actividades se suspendieron abruptamente por decisión de Vera.
“Nos habíamos visto hace un par de horas”, insistió Gastaldi, remarcando lo inesperado del giro. La cancelación de entrevistas y compromisos sin explicaciones claras generó inquietud entre las integrantes: “Eso es lo normal, quedamos en control”, señaló, haciendo referencia a la dinámica habitual del grupo.
Uno de los puntos más sensibles apareció cuando Gastaldi habló de la percepción pública sobre el apoyo interno. “Virginia en un momento me decía, afligida, que la gente piensa que nosotros no la bancamos. Es al revés”, aseguró. La artista afirmó que, lejos de dejar de acompañarla, fue Vera quien se alejó del proyecto sin dialogarlo previamente.
Consultada sobre si sienten falta de respaldo por parte de Vera, Gastaldi fue categórica: “Y no, porque teníamos todo un plan de reencontrarnos con la gente los 25 años, que si yo de repente digo: ‘Perdón, estoy estresada, me bajo’. Está bien, eso es respetable, pero hay que hablarlo y no en los medios, hay que hablarlo en persona”.
Con esta intervención, Gastaldi dejó en claro que el conflicto excede lo laboral y toca fibras emocionales profundas dentro del grupo. Para ella, el camino para resolver la interna es uno solo: diálogo directo, privado y sin intermediarios mediáticos. “La gente de a pie tiene que ser pensada”, dijo, al subrayar la importancia de cuidar no solo la historia del grupo, sino también el vínculo con el público.





















