"Tenemos miedo de que nos planten alguna prueba"

Los Acevedo-González fueron a Tribunales. "El 26 de febrero se jugó el clásico y estuvimos toda esa mañana organizando los detalles".

EL CENTRO DE LA INVESTIGACION. Arriba, uno de los allanamientos realizados en “El Sifón”. Abajo, los hermanos González-Acevedo. LA GACETA / JOSE NUNO EL CENTRO DE LA INVESTIGACION. Arriba, uno de los allanamientos realizados en “El Sifón”. Abajo, los hermanos González-Acevedo. LA GACETA / JOSE NUNO
26 Abril 2006
“Con tantos allanamientos que nos están haciendo, tengo miedo de que nos pongan alguna prueba en contra de nosotros. Eso es muy fácil de hacer, y más ahora, que Gendarmería Nacional y la Policía Federal ya no están”, aseguró Gustavo “El Gordo” González que, junto a sus hermanos Julio y Jorge “Jazo” Acevedo, se puso a disposición de la Justicia.
La Policía, en el marco de la investigación del crimen de Paulina Lebbos, además de allanar sus casas, también estuvieron en las de Walter “Chichilo” y de Sergio “Chupete” Acevedo, que está detenido en Villa Urquiza hace casi ya dos años. “Esto es insólito”, comentó Julio.
“El Gordo” sostiene que no entienden cómo la Policía los involucra en el caso. “El 26 de febrero se jugó el clásico y, como líderes de la barra de Atlético, estuvimos toda esa mañana organizando los detalles”, aseguró.
Los tres confirmaron, además, que esa actividad no puede ser desconocida por los investigadores. “Nos reunimos con el subjefe de Policía, (Nicolás) Barrera, para dejar todo bien organizado”, señaló González.
Los hermanos dijeron, además, que no constituye un problema para ellos que la Policía les allane sus viviendas. “Cada vez que nos visiten, estaremos acompañados por abogado y escribano”, indicó González. Los hermanos no sólo negaron haber conocido a Paulina, sino que reconocieron que, desde hace años, no tienen contacto con César Soto. “El era de la barra, pero estaba perdido, del otro lado. La última vez que viajó con nosotros fue cuando Atlético salió campeón en Pergamino. Ahí le robó la camiseta que (Federico) Martorell le regaló a mi hijo. Desde entonces no volvió nunca más”, señaló “El Gordo”. Julio y Gustavo, a pesar de sentirse perseguidos por la Policía, aseguran que siguen confiando en la Justicia. “Sabemos que, además de los allanamientos, pidieron nuestras detenciones. Pero no las autorizaron, porque no hay ninguna prueba en contra de nosotros”, señalaron.
Ayer a la tarde, nuevamente, personal de la Dirección de Investigaciones realizó allanamientos en la casa de la familia Acevedo-González, en “El Sifón.” Fueron en total cuatro operativos realizados a pedido del fiscal Carlos Albaca. Al igual que en los casos anteriores, se secuestraron cabellos y ropas. Todo será analizado por personal de la Policía Científica.