14 Mayo 2006
La investigación por el crimen de Paulina Lebbos, después de un parate de 15 días, volverá a activarse a partir de mañana, cuando comiencen a declarar varias personas que pueden aportar datos para el esclarecimiento del caso. Mientras tanto, la querella estaría analizando la posibilidad de recurrir a un juez para que ordene la investigación.
El primero que se sentará ante el fiscal Carlos Albaca, será "Kim", uno de los integrantes de la familia González-Acevedo, que es menor de edad. No se descarta que además le soliciten la extracción de cabellos para compararlos con los que se encontraron junto a los restos de la joven.
Albaca le preguntaría que hizo el fin de semana en el que desapareció Paulina. Un detenido por otra causa, conocido como "El Pelao", dijo que el menor, manejando un Peugeot 405 bordó, fue el remisero que llevó a Paulina y a su amiga Virginia Mercado desde la zona del ex Abasto. El vehículo en cuestión, pertenece a Gustavo "El Gordo" González, uno de los líderes de la barra brava de Atlético Tucumán.
Ante esta versión, la Policía allanó la casa del padre de "Kim", Sergio "Chupete" Acevedo (está detenido en el penal de Villa Urquiza) y de sus tíos "El Gordo", Walter "Chichilo", Julio "El Grinco" y Jorge "Jazo". Todos ellos también se pusieron a disposición de la Justicia, pero, hasta ahora, no declarararon.
Pedidos
Alberto Lebbos, padre de la joven y su abogado, Emilio Mrad, volverán a insistir en que sean citados funcionarios y policías a los que acusan de encubrimiento agravado.
"Vamos a aportar nuevas pruebas para demostrar nuestras sospechas. Espero que en esta ocasión nos escuchen y los encubridores sean citados a declarar una vez por todas", aseguró el profesional.
Lebbos ya no puede ocultar su malestar con el fiscal Albaca, puesto que, según su criterio, aún no citó a declarar al secretario de Seguridad, Eduardo di Lella, al jefe y subjefe de Policía, Hugo Sánchez y Nicolás Barrera, el jefe de la Unidad Regional Norte, Rubén Brito y al personal de la comisaría de Raco, Enrique García, Manuel Yapura y Roberto Lencina.
En caso de que no prospere el pedido, la querella ya habría decidido presentarse ante un juez para solicitar que ordene el cumplimiento de las medidas que vienen solicitando desde hace varias semanas, lo que provocaría la apertura de un nuevo frente en la investigación del complicado caso.
El primero que se sentará ante el fiscal Carlos Albaca, será "Kim", uno de los integrantes de la familia González-Acevedo, que es menor de edad. No se descarta que además le soliciten la extracción de cabellos para compararlos con los que se encontraron junto a los restos de la joven.
Albaca le preguntaría que hizo el fin de semana en el que desapareció Paulina. Un detenido por otra causa, conocido como "El Pelao", dijo que el menor, manejando un Peugeot 405 bordó, fue el remisero que llevó a Paulina y a su amiga Virginia Mercado desde la zona del ex Abasto. El vehículo en cuestión, pertenece a Gustavo "El Gordo" González, uno de los líderes de la barra brava de Atlético Tucumán.
Ante esta versión, la Policía allanó la casa del padre de "Kim", Sergio "Chupete" Acevedo (está detenido en el penal de Villa Urquiza) y de sus tíos "El Gordo", Walter "Chichilo", Julio "El Grinco" y Jorge "Jazo". Todos ellos también se pusieron a disposición de la Justicia, pero, hasta ahora, no declarararon.
Pedidos
Alberto Lebbos, padre de la joven y su abogado, Emilio Mrad, volverán a insistir en que sean citados funcionarios y policías a los que acusan de encubrimiento agravado.
"Vamos a aportar nuevas pruebas para demostrar nuestras sospechas. Espero que en esta ocasión nos escuchen y los encubridores sean citados a declarar una vez por todas", aseguró el profesional.
Lebbos ya no puede ocultar su malestar con el fiscal Albaca, puesto que, según su criterio, aún no citó a declarar al secretario de Seguridad, Eduardo di Lella, al jefe y subjefe de Policía, Hugo Sánchez y Nicolás Barrera, el jefe de la Unidad Regional Norte, Rubén Brito y al personal de la comisaría de Raco, Enrique García, Manuel Yapura y Roberto Lencina.
En caso de que no prospere el pedido, la querella ya habría decidido presentarse ante un juez para solicitar que ordene el cumplimiento de las medidas que vienen solicitando desde hace varias semanas, lo que provocaría la apertura de un nuevo frente en la investigación del complicado caso.