Puede ser el gran día de Los Pumas. Parece una utopía, pero no lo es. Hay muchas razones para pensar en que Los Pumas pueden vencer a los Wallabies. Si bien consideramos que el rugby argentino aún está lejos del que se juega en Nueva Zelanda, Australia y Sudáfrica (dueños del podio, en ese orden del ranking mundial), también creemos que pensar en una victoria de nuestro seleccionado no es descabellado.
El rival será durísimo. A pesar de sufrir algunas ausencias obligadas, Australia es un gran equipo y buscará en su casa sumar una nueva victoria, como la que consiguió siete días atrás sobre los Springboks. Su mayor virtud contra el equipo nacional será la velocidad y el ritmo que le impone al juego. Intentará sorprender con distintas variantes ofensivas a Los Pumas, sabiendo de la buena defensa y el tackle certero de los hombres de la camiseta blanquiceleste.
No será nada fácil. Al contrario, será un choque durísimo para los argentinos. Pero pueden ganar. Porque hay razones y argumentos para pensar en el batacazo. Las claves:
1) Una gran defensa. Los Pumas han demostrado en los partidos anteriores que cuentan con un buen tackle y una defensa eficaz. Ni los All Blacks ni los Springboks pudieron sumar el punto bonus ante el seleccionado argentino. A mejorar: se debe bajar el nivel de infracciones. Poco a poco se lo va consiguiendo, pero aún es un punto débil, ya que se regalan puntos y, además, hasta ha generado jugar con un hombre menos por alguna amarilla.
2) La concentración. En el partido contra los All Blacks, en especial, Los Pumas han logrado mantener en gran parte del partido una gran concentración. El mayor problema es el tiempo que se puede sostener. Falta aguantar los 80 minutos. Si lo logran, será un punto clave que ayudará a cosechar un buen resultado.
3) Las formaciones: hasta ahora han mostrado algunos altibajos en los distintos partidos. Si logran mantener la calidad mostrada en los mejores momentos que tuvo ante Sudáfrica y ante Nueva Zelanda, pueden alcanzar una buena producción. El scrum se ha mostrado sólido y el line out con buenas variantes. A Sudáfrica le robaron dos pelotas en la hilera, pero contra los All Blacks tuvieron algunos problemas. Si se mejora en ese aspecto y se explota su mejor line, puede ser muy positivo. En las formaciones móviles han trabajado muy bien en los rucks, aunque han sufrido el buen contraruck de los neozelandeses. El maul ha demostrado ser un arma clave y fundamental. Le dio buenos frutos en los tres partidos anteriores.
4) Las patadas: El punto más flojo está en los pateadores. Un tema que Los Pumas aún no pueden resolver. Desde hace tiempo. Para este partido se han designado a Juan Martín Hernández y a Marcelo Bosch, como segunda opción, para los envíos a los palos. Ya lo dijimos varias veces: a este nivel no se puede jugar sin un pateador efectivo. No se pueden regalar puntos claves. Confiamos en que JMH pueda estar iluminado y sumar puntos importantes.
5) El ataque: es la cuenta pendiente. El problema es la gran diferencia física, atlética y técnica con estos equipos. Entonces, es difícil contar con pelotas de calidad y, por ende, atacar por los espacios claros utilizando los distintos canales. Hasta ahora ha demostrado utilizar bien el contraataque y esta, será una buena arma a tener en cuenta. Pero también sería importante que Los Pumas puedan contar con pelotas claras y animarse a jugar más. Será difícil, pero no imposible.
6) El corazón. Mucho se ha hablado a través de la historia del corazón y la garra de Los Pumas. Ya se dijo desde el Mundial de 2007: en la cancha "son 15 hermanos unidos por el corazón". Una vez más, para ganar a este nivel, deben demostrar estar más unidos que nunca y con el corazón más latente que nunca. Los Pumas cuentan con este plus, como ningún otro.
Entonces, a madrugar mañana. Puede ser el gran día de Los Pumas.