22 Diciembre 2012
REJAS Y CANDADOS. Personal de algunos comercios salió a custodiar los negocios con palos o fierros. LA GACETA / FOTO DE OSCAR FERRONATO
La tensión por los desmanes de esta tarde abrieron un interrogante en la actividad comercial. La preocupación es generalizada. Los comerciantes están desorientados pero consideran que el Gobierno debería actuar de inmediato y garantizar la seguridad para que mañana y el lunes puedan trabajar con normalidad.
"Recibí distintas versiones. Algunos socios dicen que saquearon en sus negocios mientras otros sostienen que vieron corridas en las calles y que la gente está atemorizada. Estamos tratando de comunicarnos con autoridades del gobierno pero todavía no nos respondieron", dijo Raúl Fioretti, titular de la cámara de comercio de la Capital.
El comerciante también señaló que el gobierno debería proteger al comerciante que está poniendo en riesgo su capital y permitir que, para recuperar las pérdidas en ventas que tuvieron hoy, mañana se trabaje todo el día y que el lunes los locales permanezcan abiertos hasta las 18.
"En Buenos Aires y en otras ciudades se va trabajar de esa manera. Sólo en Tucumán lo negocios van a cerrar sus puertas a las 15. Lo que pasó (hoy) ocurrió a las 18, en plena actividad comercial y no sabemos si mañana la gente se animará a salir a comprar, más si se tiene en cuenta que muchas madres salen con sus niños", agregó Fioretti. LA GACETA ©
"Recibí distintas versiones. Algunos socios dicen que saquearon en sus negocios mientras otros sostienen que vieron corridas en las calles y que la gente está atemorizada. Estamos tratando de comunicarnos con autoridades del gobierno pero todavía no nos respondieron", dijo Raúl Fioretti, titular de la cámara de comercio de la Capital.
El comerciante también señaló que el gobierno debería proteger al comerciante que está poniendo en riesgo su capital y permitir que, para recuperar las pérdidas en ventas que tuvieron hoy, mañana se trabaje todo el día y que el lunes los locales permanezcan abiertos hasta las 18.
"En Buenos Aires y en otras ciudades se va trabajar de esa manera. Sólo en Tucumán lo negocios van a cerrar sus puertas a las 15. Lo que pasó (hoy) ocurrió a las 18, en plena actividad comercial y no sabemos si mañana la gente se animará a salir a comprar, más si se tiene en cuenta que muchas madres salen con sus niños", agregó Fioretti. LA GACETA ©
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