11 Enero 2013
Pelos, sangre e hilos ayudarían a atrapar a los ladrones que mataron al jubilado en Aguilares
La Policía afirmó que tiene dos hipótesis, pero aún no hay datos concretos que permitan afianzar algunas de las líneas de investigación. En la causa reina un total hermetismo, pero creen que se trataría de delincuentes dedicados a robos en despoblados.
RELATO. María Elsa Muro relató, en el patio de su humilde vivienda, cómo ingresaron los ladrones y golpearon a su marido, produciéndole la muerte. L GACETA / FOTO DE HECTOR PERALTA
Las hipótesis, dicen, son dos. Pero no son las únicas. Por las dudas, los investigadores prefieren guardar un total hermetismo, hasta que algún les permita, con firmeza, avanzar hacia los sospechosos de haber asesinado a Damián Ricardo Roldán.
El jubilado de 78 años murió el miércoles luego de recibir un golpe en la cabeza por parte de asaltantes que ingresaron a su casa, en Los Ríos, a dos kilómetros del centro de Aguilares.
Fuentes judiciales comentaron que la división Criminalística Sur revisó la vivienda de la víctima, y encontró pelos, manchas de sangre y pedazos de hilos que podrían haberse desprendido de las prendas que utilizaron los ladrones.
Esas serían, hasta ahora, las pruebas más firmes para tratar de llegar a algún sospechoso. Una fuente de la investigación reveló que, al haber pasado varias horas desde que se cometió el robo, hasta que la esposa de Roldán, María Elsa Muro (74), dio aviso a la Policía, les habría permitido a los asaltantes escapar sin despertar sospechas en los vecinos.
A la madrugada
El violento asalto ocurrió el miércoles alrededor de las 3. Roldán y Muro estaban en la cama cuando escucharon que intentaban abrir la puerta. El hombre se levantó con un machete, y recibió un golpe seco en la frente.
Roldán cayó al piso inconsciente. Lo ataron y lo arrastraron hasta la habitación, donde estaba Muro. Nunca despertó. Los asaltantes (según declaró la viuda era cuatro que estaban encapuchados) revolvieron toda la humilde casa, buscando dinero. Encontraron $ 600, un juego de sábanas nuevo, una escopeta y la mercadería que habían adquirido para el mes. "Dejenme un poquito para comer", les suplicó Muro inútilmente.
Los asaltantes escaparon por la puerta trasera, hacia el monte. Nadie sabe en qué escaparon. Tampoco hacia dónde se dirigieron. Fuentes de la investigación comentaron que las dos pistas que barajan están relacionadas con bandas dedicadas a robos en descampados.
Si bien es cierto que la vivienda en la que mataron a Roldán tiene otras casas vecinas, la zona está retirada del casco urbano de Aguilares, en la ruta que lleva a Villa Los Sarmiento. La elección de la propiedad que atacaron habría sido azarosa, ya que se trata de una casa humilde y las actividades de sus moradores no debería haber hecho presumir que encontrarían grandes sumas.
La causa es investigada por el fiscal de Feria del Centro Judicial Concepción, Jorge Antonio Echayde. Una de las hipótesis es que los asaltantes que actuaron en Los Ríos fueron los mismos que incendiaron la casa del agricultor Felipe Díaz, una hora antes del violento asalto.
Esos hombres, al no haber podido ingresar a la vivienda por la resistencia de su propietario, le prendieron fuego, quemándola completamente.
El jubilado de 78 años murió el miércoles luego de recibir un golpe en la cabeza por parte de asaltantes que ingresaron a su casa, en Los Ríos, a dos kilómetros del centro de Aguilares.
Fuentes judiciales comentaron que la división Criminalística Sur revisó la vivienda de la víctima, y encontró pelos, manchas de sangre y pedazos de hilos que podrían haberse desprendido de las prendas que utilizaron los ladrones.
Esas serían, hasta ahora, las pruebas más firmes para tratar de llegar a algún sospechoso. Una fuente de la investigación reveló que, al haber pasado varias horas desde que se cometió el robo, hasta que la esposa de Roldán, María Elsa Muro (74), dio aviso a la Policía, les habría permitido a los asaltantes escapar sin despertar sospechas en los vecinos.
A la madrugada
El violento asalto ocurrió el miércoles alrededor de las 3. Roldán y Muro estaban en la cama cuando escucharon que intentaban abrir la puerta. El hombre se levantó con un machete, y recibió un golpe seco en la frente.
Roldán cayó al piso inconsciente. Lo ataron y lo arrastraron hasta la habitación, donde estaba Muro. Nunca despertó. Los asaltantes (según declaró la viuda era cuatro que estaban encapuchados) revolvieron toda la humilde casa, buscando dinero. Encontraron $ 600, un juego de sábanas nuevo, una escopeta y la mercadería que habían adquirido para el mes. "Dejenme un poquito para comer", les suplicó Muro inútilmente.
Los asaltantes escaparon por la puerta trasera, hacia el monte. Nadie sabe en qué escaparon. Tampoco hacia dónde se dirigieron. Fuentes de la investigación comentaron que las dos pistas que barajan están relacionadas con bandas dedicadas a robos en descampados.
Si bien es cierto que la vivienda en la que mataron a Roldán tiene otras casas vecinas, la zona está retirada del casco urbano de Aguilares, en la ruta que lleva a Villa Los Sarmiento. La elección de la propiedad que atacaron habría sido azarosa, ya que se trata de una casa humilde y las actividades de sus moradores no debería haber hecho presumir que encontrarían grandes sumas.
La causa es investigada por el fiscal de Feria del Centro Judicial Concepción, Jorge Antonio Echayde. Una de las hipótesis es que los asaltantes que actuaron en Los Ríos fueron los mismos que incendiaron la casa del agricultor Felipe Díaz, una hora antes del violento asalto.
Esos hombres, al no haber podido ingresar a la vivienda por la resistencia de su propietario, le prendieron fuego, quemándola completamente.