15 Enero 2013
BUENOS AIRES.- La diputada nacional kirchnerista Diana Conti manifestó sus dudas respecto de la figura de Daniel Scioli como potencial sucesor de Cristina Fernández, al pedirle al gobernador bonaerense que explicite las "diferencias" que dice tener con la Presidenta en caso de querer reemplazarla en 2015. "Nosotros pensamos que él no sostendría la lucha contra el establishment. Tenemos dudas; por eso es importantísimo que aclare las diferencias, para que nos dé la chance de elegirlo", señaló la diputada "K".
Para la diputada oficialista, probablemente la jefa de Estado y Scioli se complementen, pero resaltó: "él puede jugar al fútbol una vez por semana, sacarse fotos con artistas y pasarla bien, mientras a la Presidenta se la ve trabajando 24 horas y llevando la más dura".
A esta campaña "anti Scioli" volvió a sumarse el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, al reclamarle "que explique" si las diferencias que mantiene con la jefa de Estado son "de fondo o intrascendentes". El funcionario argumentó que el Frente para la Victoria (FpV) necesita "dirigentes que expresen con claridad y sin dudas los núcleos centrales" del "modelo" que implementa Cristina. "Porque no es lo mismo tener diferencias intrascendentes que diferencias de fondo", respondió Randazzo al ser consultado sobre por qué le había pedido a Scioli públicamente que "si tiene diferencias, que las exprese".
Los reclamos para que adopte, públicamente, su adhesión "incondicional" al "modelo político y económico del kirchnerismo", le están trayendo dolores de cabeza a Scioli. Todo comenzó cuando el gobernador insistió en que tiene "diferencias" con la Presidenta. "La mayoría son coincidencias, más allá de los matices de cada uno. Eso se demostró y se puso a prueba a lo largo de 10 años intensos. No tengo que sobreactuar mi lealtad. Respondo a través de los hechos", remarcó Scioli y agregó: "esto funciona como en cualquier equipo, somos distintos y nos complementamos. Ya lo decía Néstor: no es bueno el pensamiento único". (Especial)
Para la diputada oficialista, probablemente la jefa de Estado y Scioli se complementen, pero resaltó: "él puede jugar al fútbol una vez por semana, sacarse fotos con artistas y pasarla bien, mientras a la Presidenta se la ve trabajando 24 horas y llevando la más dura".
A esta campaña "anti Scioli" volvió a sumarse el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, al reclamarle "que explique" si las diferencias que mantiene con la jefa de Estado son "de fondo o intrascendentes". El funcionario argumentó que el Frente para la Victoria (FpV) necesita "dirigentes que expresen con claridad y sin dudas los núcleos centrales" del "modelo" que implementa Cristina. "Porque no es lo mismo tener diferencias intrascendentes que diferencias de fondo", respondió Randazzo al ser consultado sobre por qué le había pedido a Scioli públicamente que "si tiene diferencias, que las exprese".
Los reclamos para que adopte, públicamente, su adhesión "incondicional" al "modelo político y económico del kirchnerismo", le están trayendo dolores de cabeza a Scioli. Todo comenzó cuando el gobernador insistió en que tiene "diferencias" con la Presidenta. "La mayoría son coincidencias, más allá de los matices de cada uno. Eso se demostró y se puso a prueba a lo largo de 10 años intensos. No tengo que sobreactuar mi lealtad. Respondo a través de los hechos", remarcó Scioli y agregó: "esto funciona como en cualquier equipo, somos distintos y nos complementamos. Ya lo decía Néstor: no es bueno el pensamiento único". (Especial)