Kicillof reclamó sostener la inversión

Pidió, además, alentar el crédito hipotecario.

 El viceministro de Economía, Axel Kicillof El viceministro de Economía, Axel Kicillof
26 Enero 2013
BUENOS AIRES.- El viceministro de Economía, Axel Kicillof, aconsejó ayer a los empresarios que no suspendan inversiones por temor a la crisis mundial, al tiempo que hizo un "llamamiento enardecido" a los bancos para que "aporte algo" en materia de créditos hipotecarios. "Hago un llamamiento encarecido a las entidades privadas para que aporten algo al mercado de créditos hipotecarios en la Argentina, para que faciliten ese tipo de préstamos", fue el inusual pedido de Kicillof, en el marco del sorteo del repechaje del Procrear, que se realizó en la sede porteña de la Lotería Nacional.

El funcionario, además, señaló que "el Estado está para dar optimismo y adoptar medidas contracíclicas, como el Programa de Crédito Argentino para enfrentar la crisis internacional" que, según afirmó, "genera incertidumbre en el comercio mundial para este año", de acuerdo con las proyecciones de los analistas. Kicillof acotó que la crisis se enfrenta "con más presencia del Estado y con más colaboración del sector privado que esperamos que no se aterrorice y retire inversiones, porque eso es como cavarse su propia fosa". "El punto central nuestro es que la economía argentina se encuentra atravesando una situación mundial complicada, pero con una convicción profunda de la presidenta (Cristina Fernández) acerca de cómo se hace para enfrentar una crisis de esta envergadura", afirmó el funcionario. En ese sentido, sostuvo: "esto es no con menos Estado, sino con más Estado y más colaboración del sector privado que esperemos que no se aterrorice, como lo ha hecho en otras oportunidades, y que empiece a ver qué puede hacer con la plata para esconderla, sino que por el contrario apueste y entienda que el empresario individual que suspenda inversiones por un panorama sombrío a escala mundial, lo que hace es cavarse su propia fosa".

"Esto es así -agregó- porque si todos hacen lo mismo, empieza una espiral de reducción de la demanda que termina perjudicándolos a ellos mismos.". (DyN)

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