Desde que comenzó el verano, las temperaturas elevadas vienen siendo una constante en Tucumán. Esta condición ambiental aumenta el riesgo de sufrir golpe de calor y deshidratación. Para evitarlos, miembros de la Asociación Argentina de Dietistas y Nutricionistas Dietistas aconsejan aumentar la ingesta de líquidos y evitar la exposición al sol en la franja horaria de 11 a 17, de más altas temperaturas y de calor agobiante.
"Durante los días tórridos y agobiantes, el cuerpo comienza a transpirar en mayor medida para poder conservar la temperatura corporal normal. En estas condiciones, la deshidratación puede aparecer si la eliminación de agua del cuerpo supera a la ingesta. De ahí que sea importante estar atento y beber mucha agua", alertó la licenciada Romina Sayar, vicepresidente de la asociación
El agua es el principal componente de nuestro cuerpo y es imprescindible para la vida porque interviene en el desarrollo de las funciones vitales del organismo. Entre la variedad de bebidas que uno podría elegir para equilibrar el balance hídrico en el cuerpo, el agua pura es la mejor opción porque no contiene aditivos ni calorías.
Durante el verano hay un mayor consumo general de bebidas no alcohólicas, pero proporcionalmente una menor elección de agua, que es la bebida más saludable. "Entre julio y septiembre de 2012, el agua pura representó el 7,7 % del consumo hogareño (dentro del mercado de bebidas sin alcohol), mientras que entre enero y marzo, representó el 7 %. Este patrón se repite año tras año", enfatizó Sayar.
Favorecen la obesidad
Resumiendo: en verano el consumo total de líquido es mayor, pero el de agua proporcionalmente menor. "Sería saludable que en todos los hogares incentiven el consumo de agua en lugar de bebidas alcohólicas o azucaradas que favorecen la epidemia de obesidad y sobrepeso", sugirió la especialista.
De acuerdo con la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), las mujeres necesitan ingerir 2 litros de líquido al día provenientes de alimentos y bebidas, mientras que los hombres necesitan 2,5 litros diarios. Algunos alimentos -como las frutas y verduras- proveen líquido al organismo, pero este aporte sólo llega a los 800 ml por día. Para completar el requerimiento del organismo debemos tomar agua.
"¿Por qué la necesidad de ingerir líquido es mayor cuando la temperatura ambiental es elevada? Sencillamente porque aumenta la pérdida de agua por transpiración y el cuerpo necesita reponer esa pérdida", machacó Sayar.
Para evitar la deshidratación hay que mantener un balance entre el ingreso y la pérdida de líquidos. El agua se elimina a través del sudor, la respiración, la orina y las heces. Además, este equilibrio es influenciado por diferentes factores ambientales (como la temperatura o la humedad) e individuales (sexo, edad, masa corporal y genética).
La actividad física aumenta significativamente las pérdidas de agua por transpiración: puede oscilar entre unos pocos mililitros hasta los 8 litros diarios.
Por eso es recomendable hidratarse antes, durante y después de la actividad física con pequeñas tomas de agua, tanto cuando la actividad física sea intensa o liviana (gimnasia, caminata o ejercicios suaves).
La Asociación Argentina de Dietistas y Nutricionistas Dietistas aconsejó enfáticamente evitar la actividad física durante las horas de temperaturas elevadas, prefiriendo la primera hora de la mañana o la última de la tarde.
Recomendaciones para tener en cuenta
- Necesidades individuales.- De acuerdo a la edad y situación de vida, las personas tienen diferentes necesidades de hidratación. Existen grupos de individuos con mayor riesgo de deshidratación, en los cuales es necesario prestar especial atención.
- Bebés.- Ofreceles agua. Los cuadros virales o bacteriales que ocasionen vómitos y diarreas pueden causar seria deshidratación en los lactantes. Concurrí al médico para que te indique cómo equilibrar el balance hídrico.
- Niños.- Son más activos que los adultos y transpiran más. Ofreceles agua fresca a lo largo del día para compensar la pérdida de líquido. Recordá que los chicos tienen menor percepción de la sed cuando están entretenidos.
- Embarazadas y en período de lactancia.- En estas etapas las mujeres son más sensibles a la sensación de sed. Esto se debe a que requieren mayor aporte de agua para producir leche y a que el organismo les demanda más cantidad de líquido durante la gestación.
- Ancianos.- El mecanismo de sensación de sed se ve alterado y pueden presentar dificultades para tragar. Tienen que ingerir más agua para que sus riñones funcionen mejor. Además, muchas veces tienen dificultad para desplazarse en busca de agua. No te olvidés de ofrecerles con frecuencia.
- Dale importancia estos signos.- El color de la orina indica el nivel de hidratación. Cuando es amarillo claro uno de encuentra dentro de niveles saludables. Si, en cambio, la orina es de color oscuro y olor fuerte es probable que exista cierto grado menor de deshidratación
- Evitá el azúcar- Para prevenir el consumo de calorías innecesarias seguí estas recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud las indicaciones de la OMS: reducí el consumo diario de azúcar; en tu ingesta diaria de líquido preferir optá por consumir agua o bebidas e infusiones que sean libres de azúcares. De esta manera, adoptarás el hábito saludable de ingerir agua porque ayuda al control y prevención del sobrepeso y la obesidad.