Una de cal, otra de arena

Uni (T) superó airoso la visita al Jockey salteño, pero Santiago Lawn Tennis amargó a Lince

FRAGOR DE LA LUCHA. Jockey (S)-Uni volvió a ser un duelo de alta intensidad. FRAGOR DE LA LUCHA. Jockey (S)-Uni volvió a ser un duelo de alta intensidad.
18 Marzo 2013
Universitario desembarcó en el Regional 2013 cumpliendo el mandato que se había autoimpuesto: ganarle como fuera al Jockey de Salta, ese mismo que el año pasado le había plantado resistencia en tres partidazos, dos de los cuales quedaron en manos de las "serpientes". En el otro extremo de la cuerda, Lince: a la derrota del debut le sumó otra frente a Santiago Lawn Tennis, por 48-31. Para colmo, ambas fueron en su cancha.

Con varias caras nuevas en el plantel superior, Universitario se topó con una dura piedra en el inicio de su camino a la reconquista del Regional. Jockey de Salta, uno de los equipos que mayor crecimiento rugbístico ha demostrado en los últimos años, lo castigó de entrada con un try convertido, pero la "U" no dejó amedrentar. Reforzó su defensa y apostó a la efectividad de Juan Rodríguez para mantener palo y palo en el tanteador. El parcial (13-12 para los salteños) permiten deducir las acciones.

En el complemento hay que buscar lo mejor de las "serpientes": superada la primera veintena, llegó una ráfaga de tres tries convenientemente convertidos que inclinaron la balanza casi definitivamente para el lado tucumano. Con los números a favor, "Uni" clausuró todas las entradas posibles y volvió a frustrar al "albirrojo".

Diametralmente opuesta fue la trama "lincera". Bendecido por el fixture con dos fechas de local en el arranque, lo único que cosechó en ambas fue un bonus defensivo en el debut. De ahí en más, solo incertidumbre y dos caídas que menguaron su stock de confianza.

Lo de los "grises" es llamativo: cuando se esperaba que trituraran al Lawn Tennis santiagueño para reconfortarse por el sinsabor ante "Uni" de Salta, se quedaron sin argumentos. Las infracciones le dejaron el camino libre al afinado pie de Agustín Cartier, que sumó con penales y dos excelentes drops. El segundo tiempo de Lince fue incluso más borroso: falló en la marca y administró mal la pelota cuando la tuvo.

El propio entrenador, Willy Lamarca, lo dejó en claro: "para llegar al ingoal contrario hay que jugar de pie y tener la pelota. No hicimos ninguna de las dos cosas".

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