En Cannes hubo aplausos para Oriente y un robo de joyas "de película"

Mientras los tucumanos Ezequiel Radusky y Agustín Toscano esperan el lunes, cuando presentarán su ópera prima, "Los dueños", en Cannes los indicadores, son, por ahora los aplausos. Y si los aplausos son un medidor, por ahora las estrellas vinieron de oriente.

El director iraní Asghar Farhadi se presentó en este festival por primera vez con su sexta película: "Le Passé", en la que da una vuelta de tuerca a las relaciones familiares. El año pasado ya lo había hecho con "Nader y Simin, una separación", por la cual ganó un Oscar. El filme de este año está protagonizado por la franco-argentina Bérénice Bejo (que saltó a la fama en "El artista", por la que fue candidata a un Oscar).

"No hay nada más universal que la familia. Las relaciones familiares tienen numerosos matices; el dolor y el sufrimiento que provocan son siempre nuevos e inéditos. La temática, aunque se aborde toda la vida, jamás se agotará", señaló en una nutrida rueda de prensa.

Por su parte, el chino Jia Zhang-Ke presentó ayer "A Touch of Sin", su tercer intento de conseguir la Palma de Oro. La película está dividida en cuatro historias y busca echar una mirada sobre lo que al director le preocupa de la China contemporánea: la violencia. Las historias narran cuatro asesinatos y un suicidio. Los protagonistas viven situaciones de abuso y de indefensión que los conducen al límite.

Robo millonario
Un hecho desagradable empañó la fiesta ayer: una serie de joyas valuadas en alrededor de U$S 1,4 millón que iban a ser usadas por las celebridades fueron robadas. Estaban en la caja de seguridad de la habitación de un hotel. Pertenecían a una joyería que buscaba promocionarlas entre las estrellas.