Un domingo completo... con ají

El almuerzo dominical, dominado por las versiones concentradas del locro que sobró del sábado, tuvo sabor a pelota dominada. Durante el día jugaban River, Boca y Atlético; y los socios de San Martín disputaban en las urnas la suerte de la institución. Así que media tapa estaba resuelta. La presunción se confirmó en la Redacción y por doble vía. Por un lado, Lucas Mohamed había ganado la Clase 2 en el TN. Por otro, uno de los jefes estaba amargado porque había olvidado pagar la cuota del club santo y se había quedado sin votar. Estaba decidido: el grueso de la portada era para la pasión. Pero con ella no basta. Y, por su propio peso, fueron ganando espacio lo bueno (la solidaridad de los radioaficionados); lo malo (cada vez hay más pruebas referidas a irregularidades -cada vez menos presuntas- de inspectores de la Dipsa); lo horrible (la noticia del sujeto -para llamarlo de alguna manera- que abusaba de sus hijas) y lo hermoso (la consagración en Cannes de la bella Bérénice). Fue un domingo completó. Con ají. Freído, que le dicen.

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