"Bolita" es el único sospechoso del asesinato del almacenero

"Bolita" es el supuesto autor del crimen del almacenero Hugo Rivadeneira y ayer a la mañana fue atrapado por la Policía. Los uniformados aprehendieron al joven, de 17 años, a las 10, unas 12 horas después del asesinato. El menor, que quedó alojado en el Instituto Roca, fue interceptado a pocos metros de su casa, en el barrio 80 Viviendas.

La víctima tenía un almacén en Alfonsina Storni al 300, donde lo mataron de un disparo en el cuello, el lunes a las 21, presumiblemente en un intento de asalto. El hombre solía atender la despensa a través de una ventana, pero esa noche había abierto la puerta para despedir a su esposa Débora, que se dirigía a la vivienda de ambos, ubicada a dos cuadras del lugar.

En ese momento, un joven ingresó al local. Pocos segundos después, la mujer escuchó un disparo. Al voltear la mirada, se encontró con su marido tendido en el suelo. Según precisó más tarde la Policía, le habían disparado con una "tumbera".

El auxilio de los vecinos

Inmediatamente, los vecinos se acercaron al negocio. Habían escuchado los gritos desesperados de Débora y entre varios lograron parar un taxi para trasladar a la víctima al hospital Avellaneda. Pero el almacenero llegó sin vida. "Se nos cortó en el camino", lamentó uno de ellos.

Los vecinos no quisieron dar sus nombres públicamente por temor. Según manifestaron, tanto el homicida como el joven que lo esperaba en una moto listo para huir pasan diariamente por la zona. "Hay mucha gente peligrosa y tenemos miedo de que tomen represalias", se justificó uno de los hombres que acudió a la despensa tras el disparo.

Desde abajo Clara Griselda Silva, la dueña de la propiedad en la que Rivadeneira tenía la despensa, comentó que la pareja la peleaba día a día para darles un mejor pasar a sus hijos de ocho meses y de dos años.

"La conozco a Débora desde chiquita porque soy muy amiga de la madre. Les prestaba el local para que pudieran tener un ingreso. Él (por la víctima) la peleaba desde abajo", contó Silva.

El marido de esta vecina tiene una carnicería al lado de la despensa de Rivadeneira. Tras el disparo, fue uno de los primeros en llegar. "Él dice que no escuchó ninguna discusión previa. Arruinaron a una familia y dejaron a dos chiquitos sin padre; para la esposa será difícil atender el negocio en el que mataron a su esposo", agregó la mujer. La calle Alfonsina Storni es la continuación de avenida Francisco de Aguirre hacia el este (pasando avenida Juan B. Justo). La despensa de Rivadeneira queda en el barrio Murga y por allí pasa la línea 11 de colectivos.

"Todos los días, a toda hora, nos roban en la parada. Y a la Policía prácticamente no se la ve", contaron los vecinos. Afirmaron también que los patrulleros sólo pasan por el lugar cuando van a realizar operativos en la zona cercana a la autopista de Circunvalación.

"A la esposa de Rivadeneira la quisieron asaltar hace un año, cuando estaba embarazada. Esto no puede seguir así. Hoy destruyeron a esta familia, mañana nos puede tocar a nosotros", expresaron los vecinos, todavía conmovidos por el hecho.

La causa se encuentra en la fiscalía de Instrucción de la I° Nominación, a cargo de Mariana Rivadeneira.