17 Junio 2013
HERMANOS. Miguel (h) y Andrés Reginato en su box de Tucumán, tras recorrer sin mayores problemas la primera etapa. FOTO GENTILEZA PRENSA REGINATO
Un largo camino a casa sin competir. Así seguramente lo sintieron los Reginato a esta primera etapa del Desafío Ruta 40 que largó muy temprano en tierras jujeñas y llegó a la capital tucumana. Es que la competencia fue suspendida por cuestiones climáticas y por que los helicópteros del servicio de seguridad y sanidad no pudieron volar.
“Fue una decisión acertada, creo que hay que pensar en la seguridad de todos”, comentó el experimentado Miguel Reginato, que llegó entero y con muchas ganas de hacer kilómetros. “Acá estoy en casa, me siento bien por la gente y todos los amigos que vinieron a verme, estoy contento y lleno de ganas de seguir para adelante en este Desafío Ruta 40”, sentenció.
En otro orden, y sobre la Toyota de la T1, los hermanos Andrés y Miguel (h) llegaron con el auto entero. “Estamos muy bien, la camioneta tenía una falla que ya fue solucionada por el equipo y eso nos pone con muchas ganas de acelerar, sabemos que la competencia es bastante larga y esto recién empieza, resaltó el piloto Andrés Reginato.
En tanto Miguel (h), de personalidad no tan explosiva, comentó: “fueron casi 650 kilómetros que hicimos hoy y todo marcha muy bien, queremos hacer las cosas a conciencia y llegar a San Juan el fin de semana.
De esta manera se cumplió la primera etapa de este Desafío Ruta 40, mañana la competencia largara desde las 6 de la mañana y visitara territorio catamarqueño para llegar al Predio Ferial, lugar donde años tras años se realiza la Fiesta Nacional e Internacional del Poncho.
NOTICIAS RELACIONADAS