21 Junio 2013
DIALOGO. La mandataria se abrió al diálogo. REUTERS.
SAO PAULO, Brasil - La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, habló esta noche sobre las protestas que invadieron las calles de su país durante esta semana. La mandataria, prometió mantener el orden y dialogar con los líderes de las manifestaciones. Además, condenó los actos de violencia y vandalismo ocurridos.
"Voy a recibir a los líderes de las manifestaciones pacíficas, de sindicatos y asociaciones populares pues precisamos de todas sus contribuciones, reflexiones y experiencias", dijo Rousseff por cadena nacional. Por esta línea, reiteró el apoyo de su Gobierno a los cambios sociales y destacó que tiene la obligación de escuchar las voces en las calles y de liderar un diálogo entre todas las partes.
"Las manifestaciones de esta semana dejaron importantes lecciones; las tarifas bajaron y los reclamos de los manifestantes ganaron prioridad nacional", expresó. "Tenemos que aprovechar el vigor de las manifestaciones para producir más cambios que beneficien al conjunto de la población brasileña", agregó.
Por otro lado, la presidenta del gigante sudamericano dijo que el dinero gastado en la construcción de estadios para la Copa del Mundo no sale del erario público. "En relación a la Copa, quiero aclarar que el dinero que el Gobierno federal gastó en los estadios es fruto del financiamiento que será debidamente pagado por las empresas y gobiernos que están explotando esos estadios", explicó.
El jueves, alrededor de un millón de personas salieron a las calles a protestar por varios temas, desde la corrupción y el pobre estado del transporte público, hasta el gasto para la organización del Mundial de fútbol el próximo año y los Juegos Olímpicos 2016. (Télam- Reuters)
"Voy a recibir a los líderes de las manifestaciones pacíficas, de sindicatos y asociaciones populares pues precisamos de todas sus contribuciones, reflexiones y experiencias", dijo Rousseff por cadena nacional. Por esta línea, reiteró el apoyo de su Gobierno a los cambios sociales y destacó que tiene la obligación de escuchar las voces en las calles y de liderar un diálogo entre todas las partes.
"Las manifestaciones de esta semana dejaron importantes lecciones; las tarifas bajaron y los reclamos de los manifestantes ganaron prioridad nacional", expresó. "Tenemos que aprovechar el vigor de las manifestaciones para producir más cambios que beneficien al conjunto de la población brasileña", agregó.
Por otro lado, la presidenta del gigante sudamericano dijo que el dinero gastado en la construcción de estadios para la Copa del Mundo no sale del erario público. "En relación a la Copa, quiero aclarar que el dinero que el Gobierno federal gastó en los estadios es fruto del financiamiento que será debidamente pagado por las empresas y gobiernos que están explotando esos estadios", explicó.
El jueves, alrededor de un millón de personas salieron a las calles a protestar por varios temas, desde la corrupción y el pobre estado del transporte público, hasta el gasto para la organización del Mundial de fútbol el próximo año y los Juegos Olímpicos 2016. (Télam- Reuters)
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