30 Agosto 2013
RECUPERACIÓN. Los lugareños sueñan con que el viejo edificio mejore.
La desidia parece tener los días contados en la ex hostería de Amaicha del Valle, que durante muchos años cayó en un estado de abandono que parecía irreversible. Ahora, el edificio que pertenece a la Provincia, está siendo recuperada de a poco por la Comunidad Indígena del lugar (CIAV).
En 2011, la ex hostería había sido ocupada por comuneros de la zona, quienes vieron la necesidad de convertirla en un emprendimiento útil a los proyectos de desarrollo económico de la zona. Al tomar la decisión, la gente apeló a derechos territoriales antiguos. Sin embargo, enfrentan por parte del Gobierno tucumano una demanda judicial por usurpación. El conflicto legal, de todos modos, se encamina a un acuerdo de partes que permitirá la total recuperación y aprovechamiento del inmueble, transformado en ruinas.
Una recorrida por el edificio muestra las huellas que dejó el vandalismo: la ex hostería fue totalmente desmantelada, le sacaron las puertas, las ventanas y todos los muebles. El tiempo y la falta de mantenimiento hicieron el resto.
"El trabajo a encarar es duro y costoso", reconoció el cacique Eduardo Nieva. La CIAV logró refaccionar varias dependencias del edificio, ubicado a 100 metros de la plaza principal. En estas funcionan ahora la Casa de Gobernanza de la comunidad, las oficinas del cacique, del Concejo de Anciano, un Jardín Maternal, una biblioteca y un Centro de Desarrollo Infantil. La semana pasada se inauguró también una fábrica de cerveza de algarroba elaborada por estudiantes del Instituto Técnico Superior (IES) de ese pueblo.
Por día pasan por el centro comunitario alrededor de 200 personas. "Cuando hace tres años nos decidimos a ocupar este edificio, daba pena ver cómo se encontraba. Parecía que lo habían bombardeado. Entonces tomamos conciencia del desafío que nos esperaba", contó Nieva. "El día que habilitamos las oficinas y las otras dependencias, estuvimos muy contentos porque demostramos que se puede sacar adelante la ex hostería", apuntó el líder comunitario.
El proyecto que maneja la CIAV es ambicioso y demandará una inversión superior a los $ 8 millones. "Nos proponemos recuperar unas 16 habitaciones, construir un salón multiuso y un comedor en el que se preparen exclusivamente comidas típicas. La parte de arriba sería la de hospedaje, mientras que la de abajo de servicios", comentó.
El diseño de reconstrucción y refacción del inmueble fue realizado por arquitectos de la UNT. Los profesionales también elaboraron un modelo de cabañas para ser utilizado con fines turísticos. El lugar también dispondrá de una galería en la que artesanos de la zona podrán exponer sus trabajos. La comunidad ya tiene preparada la carpeta de los proyectos a fin de ser presentada ante la Nación, que se comprometió a brindar los recursos necesarios para las obras.
Nieva está seguro que la ex hostería le brindará un gran impulso al turismo y la economía de Amaicha del Valle, que está bendecida con un clima muy benigno, cuya media no supera en todo el año los 20 grados. Este microclima tan particular, según los lugareños, hace de este pueblo un lugar especial.
"Es una lástima lo que se hizo con esta obra que fue un lujo. Hubo gente interesada en dejarla caer. Pero nosotros ahora la vamos a sacar adelante", aseguró Luis Masa, uno de los vecinos dispuestos a aportar su esfuerzo para que la hostería recupere la plenitud de otros años.
Otro proyecto
La bodega de varietales es otro de los proyectos que ya están en marcha en ese pueblo y que demandará una inversión cercana a los $ 5 millones. Su inauguración está prevista para el próximo año. Se van a a producir vinos malbec, cabernet sauvignon y merlot. "El objetivo es obtener variedades con identidad propia y colectiva", comentó el cacique Nieva. En la iniciativa están involucrados unos 120 productores de viñedos que, a partir de la próxima semana, recibirán cepas nuevas y serán capacitados por profesionales del Instituto Nacional de Vitivinicultura de la Nación (INV). Las maquinarias serán adquiridas en Mendoza a través de recursos del Ministerio de Agricultura de la Nación. La planta industrial, que prevé producir por campaña unos 190.000 litros de esa bebida, es levantada con piedra y otros materiales autóctonos en el paraje El Tío. Su diseño contempla una plaza temática de artesanos, un salón de degustación y de comidas.
Falta de mantenimiento
Desde hace 20 años añora sus tiempos de esplendor
La sucesión de cierres y reaperturas de la hostería de Amaicha del Valle comenzaron en 1965. En 1992, por primera vez se licitaron obras para mejorarla y explotar sus servicios. Pero nunca se hizo nada y el Gobierno dispuso anular la venta a la empresa que había sido elegida. Desde entonces, el inmueble fue testigo de la depredación y de la falta de mantenimiento.
En 2011, la ex hostería había sido ocupada por comuneros de la zona, quienes vieron la necesidad de convertirla en un emprendimiento útil a los proyectos de desarrollo económico de la zona. Al tomar la decisión, la gente apeló a derechos territoriales antiguos. Sin embargo, enfrentan por parte del Gobierno tucumano una demanda judicial por usurpación. El conflicto legal, de todos modos, se encamina a un acuerdo de partes que permitirá la total recuperación y aprovechamiento del inmueble, transformado en ruinas.
Una recorrida por el edificio muestra las huellas que dejó el vandalismo: la ex hostería fue totalmente desmantelada, le sacaron las puertas, las ventanas y todos los muebles. El tiempo y la falta de mantenimiento hicieron el resto.
"El trabajo a encarar es duro y costoso", reconoció el cacique Eduardo Nieva. La CIAV logró refaccionar varias dependencias del edificio, ubicado a 100 metros de la plaza principal. En estas funcionan ahora la Casa de Gobernanza de la comunidad, las oficinas del cacique, del Concejo de Anciano, un Jardín Maternal, una biblioteca y un Centro de Desarrollo Infantil. La semana pasada se inauguró también una fábrica de cerveza de algarroba elaborada por estudiantes del Instituto Técnico Superior (IES) de ese pueblo.
Por día pasan por el centro comunitario alrededor de 200 personas. "Cuando hace tres años nos decidimos a ocupar este edificio, daba pena ver cómo se encontraba. Parecía que lo habían bombardeado. Entonces tomamos conciencia del desafío que nos esperaba", contó Nieva. "El día que habilitamos las oficinas y las otras dependencias, estuvimos muy contentos porque demostramos que se puede sacar adelante la ex hostería", apuntó el líder comunitario.
El proyecto que maneja la CIAV es ambicioso y demandará una inversión superior a los $ 8 millones. "Nos proponemos recuperar unas 16 habitaciones, construir un salón multiuso y un comedor en el que se preparen exclusivamente comidas típicas. La parte de arriba sería la de hospedaje, mientras que la de abajo de servicios", comentó.
El diseño de reconstrucción y refacción del inmueble fue realizado por arquitectos de la UNT. Los profesionales también elaboraron un modelo de cabañas para ser utilizado con fines turísticos. El lugar también dispondrá de una galería en la que artesanos de la zona podrán exponer sus trabajos. La comunidad ya tiene preparada la carpeta de los proyectos a fin de ser presentada ante la Nación, que se comprometió a brindar los recursos necesarios para las obras.
Nieva está seguro que la ex hostería le brindará un gran impulso al turismo y la economía de Amaicha del Valle, que está bendecida con un clima muy benigno, cuya media no supera en todo el año los 20 grados. Este microclima tan particular, según los lugareños, hace de este pueblo un lugar especial.
"Es una lástima lo que se hizo con esta obra que fue un lujo. Hubo gente interesada en dejarla caer. Pero nosotros ahora la vamos a sacar adelante", aseguró Luis Masa, uno de los vecinos dispuestos a aportar su esfuerzo para que la hostería recupere la plenitud de otros años.
Otro proyecto
La bodega de varietales es otro de los proyectos que ya están en marcha en ese pueblo y que demandará una inversión cercana a los $ 5 millones. Su inauguración está prevista para el próximo año. Se van a a producir vinos malbec, cabernet sauvignon y merlot. "El objetivo es obtener variedades con identidad propia y colectiva", comentó el cacique Nieva. En la iniciativa están involucrados unos 120 productores de viñedos que, a partir de la próxima semana, recibirán cepas nuevas y serán capacitados por profesionales del Instituto Nacional de Vitivinicultura de la Nación (INV). Las maquinarias serán adquiridas en Mendoza a través de recursos del Ministerio de Agricultura de la Nación. La planta industrial, que prevé producir por campaña unos 190.000 litros de esa bebida, es levantada con piedra y otros materiales autóctonos en el paraje El Tío. Su diseño contempla una plaza temática de artesanos, un salón de degustación y de comidas.
Falta de mantenimiento
Desde hace 20 años añora sus tiempos de esplendor
La sucesión de cierres y reaperturas de la hostería de Amaicha del Valle comenzaron en 1965. En 1992, por primera vez se licitaron obras para mejorarla y explotar sus servicios. Pero nunca se hizo nada y el Gobierno dispuso anular la venta a la empresa que había sido elegida. Desde entonces, el inmueble fue testigo de la depredación y de la falta de mantenimiento.