01 Septiembre 2013
RUMBO A LO MAS ALTO DEL PODIO. Leonel Pernía marca el camino. Luego de superar con su Fluence al Corolla de Matías Rossi, el corredor tandilense conservó la vanguardia durante 30 vueltas, con estilo.
SANTA FE.- "Si uno logra la pole, hay un 80% de posibilidades de ganar la final en un circuito callejero. Pero ese 20% que resta es lo más difícil de lograr". Con justeza y sin rodeos, Matías Rossi explicó anoche por qué, pese a ser el piloto más rápido de la clasificación del Súper TC2000 en el trazado urbano de Santa Fe, no logró consagrarse ganador de la prueba con su Toyota Corolla. En cambio, quien festejó en la octava fecha fue Leonel Pernía, que protagonizó una espectacular maniobra apenas se dio orden de salida (que fue en movimiento). Con su Renault Fluence terminó por ganar de punta a punta una intensa competencia que sufrió sólo un ingreso de auto de seguridad y que, como es costumbre en pistas de estas características, registró pocos sobrepasos.
"Yo sabía que una de las pocas chances que tenía de superar a Matías era en la largada. Y me jugué entero por eso. Creo que tenía más para ganar que para perder. Me salió bien", contó Pernía sobre su carrera.
La prueba, a falta de grandes novedades en las posiciones, entregó un ritmo frenético. Pernía se apoderó de la punta, pero ni Rossi ni Néstor Girolami se la hicieron fácil. Este último apuntó: "era una utopía pensar que Leonel nos deje un espacio para el sobrepasarlo. Entonces me dediqué a mantenerme lo más cerca posible, por si acaso. Eso sí, después que se fue el auto de seguridad, él hizo un poco más de diferencia. Igual, me voy conforme: a mí me tocó ganar aquí el año pasado, y ahora logré un podio", contó.
Pernía admitió que llegó a sentir la presión. "Todos los muchachos tienen condiciones de sobra, así que tuve que concentrarme al máximo para no perder lo que había logrado. Sobre todo en las primeras vueltas", señaló.
El circuito callejero santafesino, de 3.000 metros, se vio desbordado de público en todo su perímetro, en una noche de temperatura más que agradable.
El festival se completó con carreras de la Formula Renault 2.0 y de la monomarca Fiat Punto Abarth Competizione: ambas terminaron antes de tiempo por razones de seguridad, debido a accidentes. La división de monopostos se suspendió por un choque múltiple, protagonizado por once de los 17 participantes; estaba 1° el mendocino Julián Santero. Y en la de autos con techo, ganó Christian Romero. (Especial)
"Yo sabía que una de las pocas chances que tenía de superar a Matías era en la largada. Y me jugué entero por eso. Creo que tenía más para ganar que para perder. Me salió bien", contó Pernía sobre su carrera.
La prueba, a falta de grandes novedades en las posiciones, entregó un ritmo frenético. Pernía se apoderó de la punta, pero ni Rossi ni Néstor Girolami se la hicieron fácil. Este último apuntó: "era una utopía pensar que Leonel nos deje un espacio para el sobrepasarlo. Entonces me dediqué a mantenerme lo más cerca posible, por si acaso. Eso sí, después que se fue el auto de seguridad, él hizo un poco más de diferencia. Igual, me voy conforme: a mí me tocó ganar aquí el año pasado, y ahora logré un podio", contó.
Pernía admitió que llegó a sentir la presión. "Todos los muchachos tienen condiciones de sobra, así que tuve que concentrarme al máximo para no perder lo que había logrado. Sobre todo en las primeras vueltas", señaló.
El circuito callejero santafesino, de 3.000 metros, se vio desbordado de público en todo su perímetro, en una noche de temperatura más que agradable.
El festival se completó con carreras de la Formula Renault 2.0 y de la monomarca Fiat Punto Abarth Competizione: ambas terminaron antes de tiempo por razones de seguridad, debido a accidentes. La división de monopostos se suspendió por un choque múltiple, protagonizado por once de los 17 participantes; estaba 1° el mendocino Julián Santero. Y en la de autos con techo, ganó Christian Romero. (Especial)
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