21 Septiembre 2013
"Lo vamos a decir muy claro: nadie puede sentirse estafado porque las personas que no salieron adjudicatarias del primer emprendimiento de las casas en Los Pocitos formarán parte de una segunda entrega de otras 340 viviendas en Las Talitas". De esta manera, Leticia Mamaní, dirigente de la comisión directiva de la Asociación Gremial de Empleados Judiciales (AGEJ) expresó la posición de los directivos respecto de los reclamos por la presunta sobreventa de casas en un plan habitacional.
Las denuncias por este conflicto iniciaron en 2010. Pero la indignación recrudeció el mes pasado, tras conocerse que el 16 de agosto pasado se habían entregado las 227 viviendas del barrio construido en Los Pocitos. Mamaní, no obstante, se preocupó por llevar tranquilidad a las personas que reclaman. "Todos aquellos que tengan los plantes caídos van a ser atendidos en el nuevo despacho en los próximos días. Ningún caso va a quedar sin ser atendido", dijo.
AGEJ precisó que el abogado Mario Leiva fue designado para recibir la inquietud de los diferentes adjudicatarios por las viviendas, que -según el sindicato- serían entregadas en el transcurso de los próximos meses.
La comisión directiva se reunió para analizar el avance de las obras en un predio de Las Talitas, donde se estima que las viviendas pueden quedar finalizadas entre febrero y marzo de 2014. El gremio también reiteró que las nuevas viviendas se adecuan a la calidad de aquellas que fueron entregadas hace unos días a los primeros adjudicatarios.
"Nosotros damos soluciones concretas. Entregamos viviendas con una calidad de infraestructura superior y acorde al parámetro de excelencia que nos hemos planteado desde el inicio", afirmó Mamaní, quien además destacó el hecho de que ninguno de los adjudicatarios pagó suma alguna por el terreno sobre el que se asienta su propiedad. La titular del sindicato, Ada Altuve, había cuestionado días atrás las protestas de los presuntos damnificados. "No es nuestro estilo injuriar ni agravar a nadie. Nosotros damos soluciones. Y las 227 viviendas de Los Pocitos son una solución, como lo son también las 340 casas de Las Talitas y otras 100 viviendas que estamos en tratativas de conseguir", se había escudado la dirigente.
Las denuncias por este conflicto iniciaron en 2010. Pero la indignación recrudeció el mes pasado, tras conocerse que el 16 de agosto pasado se habían entregado las 227 viviendas del barrio construido en Los Pocitos. Mamaní, no obstante, se preocupó por llevar tranquilidad a las personas que reclaman. "Todos aquellos que tengan los plantes caídos van a ser atendidos en el nuevo despacho en los próximos días. Ningún caso va a quedar sin ser atendido", dijo.
AGEJ precisó que el abogado Mario Leiva fue designado para recibir la inquietud de los diferentes adjudicatarios por las viviendas, que -según el sindicato- serían entregadas en el transcurso de los próximos meses.
La comisión directiva se reunió para analizar el avance de las obras en un predio de Las Talitas, donde se estima que las viviendas pueden quedar finalizadas entre febrero y marzo de 2014. El gremio también reiteró que las nuevas viviendas se adecuan a la calidad de aquellas que fueron entregadas hace unos días a los primeros adjudicatarios.
"Nosotros damos soluciones concretas. Entregamos viviendas con una calidad de infraestructura superior y acorde al parámetro de excelencia que nos hemos planteado desde el inicio", afirmó Mamaní, quien además destacó el hecho de que ninguno de los adjudicatarios pagó suma alguna por el terreno sobre el que se asienta su propiedad. La titular del sindicato, Ada Altuve, había cuestionado días atrás las protestas de los presuntos damnificados. "No es nuestro estilo injuriar ni agravar a nadie. Nosotros damos soluciones. Y las 227 viviendas de Los Pocitos son una solución, como lo son también las 340 casas de Las Talitas y otras 100 viviendas que estamos en tratativas de conseguir", se había escudado la dirigente.