02 Febrero 2014
Choferes contra pasajeros. Allí se concentraron los problemas en el día “D” para la Tarjeta Ciudadana, jornada en que el plástico se convirtió en la única forma de pago en las líneas urbanas.
Ayer fue la primera vez, en un cuarto de siglo, que los cospeles dejaron de circular. Las filas en los puntos de venta del centro volvieron a ser la escena recurrente del sábado. También atendieron a una cantidad enorme de personas las “bocas blancas”: puntos para recargar las tarjetas, reorganizados ahora entre las plazas Independencia, Urquiza y en la peatonal Muñecas. En este último punto, realizaron más de 2.000 recargas de plásticos.
Carlos Saavedra, chofer del interno 26 de la línea 4, respondió con un leve mohín cuando se le consultó si había sufrido alguna tensión con pasajeros que no habían logrado conseguir la tarjeta. “En la zona del Mercofrut tuve algunos problemas, con mucha gente que va a trabajar al mercado. Cerca de la comisaría 11va, subieron ocho personas que intentaron pagar con dinero. Como no querían bajarse, les ofrecí llevarlos hasta la oficina de la empresa, donde pudieron conseguir la tarjeta”, respondió el chofer.
Al igual que su colega, David Niz (interno 31 de la línea 5), indicó que la mayoría de los reclamos ocurrieron en las zonas más alejadas del recorrido. “Hay algunas personas a los que les expliqué que tenía órdenes de aceptar únicamente la tarjeta y eran reacios a bajarse de la unidad”, dijo el colectivero.
El único inconveniente del sistema, según Niz, recae en la distribución. “Debería venderse en más comercios, por ejemplo, en el barrio Oeste hay sólo dos puntos de venta, y uno de ellos esta cerrado por vacaciones”, dijo. Gremialmente, indicó que el sistema les permite estar “más blanqueados”, porque constan en los registros los horarios de trabajo.
A su vez, otros dos choferes de las líneas 11 y 7 -pidieron la reserva de su nombre- indicaron que permitieron a algunas personas subir sin pagar hasta llegar a un punto de venta.
La filas de hasta 30 personas a las afueras de los drugstores se repitieron. El conglomerado de personas en el Centro de Atención al Usuario (CAU, Junín 58), esta vez se redujo. Pese a esto, los comerciantes de la cuadra volvieron a reclamar porque la fila de personas fuera de este centro de venta redujo las ventas de los comerciantes de la vereda este de Junín primera cuadra.
Cronología
La tarjeta debutó como forma de pago a finales de agosto del año pasado. Originalmente se determinó que los plásticos y las fichas convivirían hasta diciembre, primer plazo programado para sacar del circuito a las fichas plateadas. Allí se dictó la primera prórroga. El nuevo ultimátum fue marcado en el calendario para el 11 de enero. Luego de las presentaciones de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) y del Frente de Organizaciones de Defensa del Consumidor y del Usuario (Fodecus), la fecha límite de los cospeles fue trasladada, finalmente, para el 31 de enero.
La Municipalidad volvió a recibir planteos del sector empresario y de Fodecus para una nueva prórroga, poniendo el foco en la gestión comercial y en la distribución de los plásticos. El miércoles, los empresarios indicaron que, según sus estimaciones, apenas el 50% de los usuarios se manejaba en los ómnibus urbanos con la tarjeta. Esta vez, la determinación del ejecutivo capitalino fue firme: adiós cospel.
Recién en la semana previa a la última fecha límite, desde la empresa Atos (a cargo de la implementación del sistema), agregaron 50 puntos de venta más a los 194 disponibles. Lanzaron más tarjetas a la calle. Implementaron las bocas móviles y desde la empresa anunciaron que, cerrado el acuerdo con los supermercadistas locales, la tarjeta también podría adquirirse en los súper.
A los largo de febrero, se espera que ingresen finalmente las tarjetas precargadas, que podrán venderse en comercios sin que estos deban realizar la inversión para recibir -en comodato- el pósnet para realizar la recarga de los plásticos. Además, se incorporarán puntos de carga automática, instalando aparatos similares a los cajeros automáticos, pero para la tarjeta Ciudadana.
El saldo negativo, la posibilidad de realizar hasta dos viajes sin crédito en las tarjetas de tipo nominal, entraría en vigencia también en las próximas semanas. Lentamente, los tucumanos nos acostumbraremos a este sistema.
Datos útiles de la tarjeta
- La única forma de pago en las líneas urbanas es la Tarjeta Ciudadana
- Consultá los puntos de venta en la página (www.sanmigueldetucuman.gov.ar)
- También podés comprar la tarjeta en las oficinas de las empresas y en el Centro de Atención de Junín 58
- Por ahora, sólo se venden las tarjetas nominales. Tenes que llevar el DNI para comprarlas
- Si estas en el centro, recargá tu tarjeta en los puntos móviles ubicados en las plazas Urquiza, Independencia y en la peatonal Muñecas
- Si perdés la tarjeta, llamá al 0800 444 8483
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