26 Mayo 2014
REUTERS
JERUSALEN, Israel.- El papa Francisco pidió hoy a Dios en el museo del Holocausto en Jerusalén que "nunca más" permita un horror como el del holocausto, "una monstruosidad" y "un pecado" de la que los hombres deben "avergonzarse".
Francisco pronunció una sentida oración tras saludar con calidez a siete sobrevivientes de aquel genocidio, encender el fuego de la memoria y rezar ante una corona de flores que le presentaron una niña católica y un niño judío.
"En este lugar, memorial de la shoá, sentimos resonar la pregunta de Dios. Adán, ¿dónde estás? ... Pecamos contra ti Señor, tú que reinas eternamente, recuérdanos en tu misericordia. Danos la gracia de avergonzarnos de que lo que como hombres hemos hecho. De avergonzarnos de haber despreciado y destruido nuestra carne. La que tú sacaste del barro y diste tu aliento de vida. Nunca más Señor, nunca más. Adán, ¿dónde estás? Estamos aquí, Señor, con la vergüenza de lo que el hombre, creado a tu imagen y semejanza, fue capaz de hacer. Recuérdanos en tu misericordia", expresó en el memorial de Yad Vashem que conmemora las víctimas del Holocausto durante la Segunda Guerra Mundial.
También, el papa estuvo hoy el Muro de los Lamentos, el lugar más sagrado del Judaísmo, situado en el corazón del casco viejo de Jerusalén, al que se acercó para dejar una oración.