Ni pensará en críticas

BRASILIA.- Un Brasil cuestionado por las mediocres actuaciones en lo que va de Mundial buscará, a las 17, el pase a los octavos de final ante un Camerún ya eliminado. De entrada todos apostaron no le costaría en absoluto pero hoy, por el juego desplegado, podría al menos instalar un llamado de atención. ¿Podrá Brasil desplegar el jogo bonito que todos esperaron ver y hasta ahora no apareció?

Pese a que es el anfitrión y a que ganó los seis duelos mundialistas librados con equipos africanos desde Alemania 1974, los jugadores del “pentacampeón” encaran con inusual cautela el choque. “Será un partido muy difícil, porque el rival no enfrenta ninguna presión. Está eliminado y estará enfrentando a Brasil, en Brasil. Toda la presión estará sobre nosotros”, argumentó Dani Alves.

Por primera vez desde Argentina 1978, Brasil llega al tercer partido de la fase de grupos de un Mundial sin tener asegurada su clasificación. Entonces, para lograr el pase a octavos sin depender del resultado del choque Croacia-México, que se librará en el mismo momento en Recife, los anfitriones necesitan al menos un empate.

Es más, para cumplir el objetivo de avanzar primeros del grupo y disipar la insatisfacción de su hinchada por el desempeño de la selección, requieren una victoria convincente y amplia.

Alves, sin embargo, aseguró que al equipo no le preocupan las críticas de los hinchas y de los analistas porque el principal objetivo no es encantar ni vencer por goleada. “Queremos resultados. Si podemos unir un buen fútbol al resultado, mucho mejor. Pero en el fútbol, la gente sólo recuerda a los campeones”, dijo bien seguro de sus palabras y soñando con repetir aquellas tantas glorias.

Para los brasileños, el choque con Camerún podría convertirse en un partido de riesgo: “ellos vienen con el orgullo herido, con ganas de derrotar a Brasil, lo que sería como un título para ellos”, avisó el zaguero David Luiz. Camerún, a su vez, llega al partido como un equipo golpeado y dividido, como quedó evidente en la pelea entre Benoit Assou-Ekotto y Benjamin Moukandjo después de la derrota 4-0 en manos de Croacia.

Temor

Pero los brasileños temen el estilo de juego fuerte de Camerún, en especial porque tres de sus principales titulares -el astro Neymar, el capitán y zaguero Thiago Silva y el volante Luiz Gustavo- ya recibieron tarjetas amarillas y, si vuelven a ser amonestados, quedarán excluidos del eventual partido de octavos ante Holanda o Chile. “Intentaremos de alguna manera superar el juego duro e intenso de ellos y obtener un buen resultado sin que haya perjuicios”, prometió Alves.

El entrenador Luiz Felipe Scolari intensificó en los últimos dos días el ritmo de las prácticas de Brasil, en las que insistió con sus pupilos en una salida de pelota más rápida y en una marca más fuerte sobre el adversario.

“Felipao” planea repetir ante Camerún la alineación titular utilizada en el debut cuando Brasil se impuso 3-1 sobre Croacia, en parte gracias a un dudoso penal sobre Fred. Ello significa el regreso al equipo del delantero Hulk, quien fue reemplazado por Ramires en el empate sin tantos con México, por unas molestias musculares.