02 Julio 2014
DEFENSA. “Debemos ser más firmes en el contacto. Los chicos deben creer más en el equipo que tienen”, destacó Rubino. la gaceta / foto de jorge olmos sgrosso
Los techos en avenida Benjamín Aráoz al 700 todavía no están como para manteca, pero el humor definitivamente ha cambiado en las últimas dos semanas. Hasta la fecha 6, puras derrotas. En las últimas tres, un empate y dos triunfos. El último lo consiguió el domingo frente a Aguará Guazú, en el cierre de la fecha 9 del Regional “Copa LA GACETA”, en la que salió todo a pedir de los “blancos”: los tropiezos de Lince y Tigres les permitieron salir por fin del penúltimo puesto y escalar hasta el 13°, sólo dos puntos por debajo de Jockey tucumano, que también perdió. Las chances matemáticas, aunque exiguas, aún existen: por ahora, el octavo puesto (último que otorga entrada al Súper 8) es propiedad de Gimnasia y Tiro, que tiene 25 puntos y le lleva 12 a Natación.
“Pero se tendrían que alinear los astros”, llama la atención el entrenador José Rubino, para quien vale más tener los pies en la tierra que en las nubes. Máxime considerando que en ese camino al cielo, Natación deberá enfrentar a cuatro de los cinco primeros de la tabla en las próximas fechas. En efecto, después del partido de este fin de semana contra Huirapuca, lo esperan: Cardenales, Tucumán Rugby, Los Tarcos y Universitario. Digamos, un “túnel de la muerte”.
“Sabemos que hay posibilidades, pero son muy escasas. Honestamente, no tenemos suficiente plantel como para llegar. Por eso la idea es, de acá hasta que termine la fase, recuperar la mayor cantidad de jugadores posible y darle minutos a los más chicos a fin de tener un plantel más numeroso para la segunda etapa, que es cuando hay menor motivación entre los que no clasifican”, reveló.
Al entrenador, que se puso al frente del equipo hace algunas fechas, no le gusta perder tiempo lamentándose. “Sí, podríamos haber estado un poco mejor si no se nos hubieran lesionado tantos jugadores, o si tuviéramos una mayor cantidad, pero bueno; como se dice, si mi abuela no se hubiera muerto, seguiría viva. Esta es nuestra realidad y debemos trabajar sobre ella, para que la brecha entre titulares y suplentes sea más corta, a fin de tener un equipo más compacto”, graficó Rubino.
En ello jugará un papel importante lo mental. “Todos estos cambios que se produjeron producen dudas y falta de confianza. Necesitamos que los chicos crean en el equipo que tienen, y a partir de ahí ser defensivamente más fuertes en el contacto y no tan especulativos. Tenemos que ser más desafiantes, más intensos. Necesitamos cambiar esa mentalidad del Natación que casi le gana a tal o cual. Hay que salir del casi y arriesgar más. Será muy difícil vencer a los de arriba, pero algún susto queremos darles. Tenemos con qué hacerlo”, concluyó.
“Pero se tendrían que alinear los astros”, llama la atención el entrenador José Rubino, para quien vale más tener los pies en la tierra que en las nubes. Máxime considerando que en ese camino al cielo, Natación deberá enfrentar a cuatro de los cinco primeros de la tabla en las próximas fechas. En efecto, después del partido de este fin de semana contra Huirapuca, lo esperan: Cardenales, Tucumán Rugby, Los Tarcos y Universitario. Digamos, un “túnel de la muerte”.
“Sabemos que hay posibilidades, pero son muy escasas. Honestamente, no tenemos suficiente plantel como para llegar. Por eso la idea es, de acá hasta que termine la fase, recuperar la mayor cantidad de jugadores posible y darle minutos a los más chicos a fin de tener un plantel más numeroso para la segunda etapa, que es cuando hay menor motivación entre los que no clasifican”, reveló.
Al entrenador, que se puso al frente del equipo hace algunas fechas, no le gusta perder tiempo lamentándose. “Sí, podríamos haber estado un poco mejor si no se nos hubieran lesionado tantos jugadores, o si tuviéramos una mayor cantidad, pero bueno; como se dice, si mi abuela no se hubiera muerto, seguiría viva. Esta es nuestra realidad y debemos trabajar sobre ella, para que la brecha entre titulares y suplentes sea más corta, a fin de tener un equipo más compacto”, graficó Rubino.
En ello jugará un papel importante lo mental. “Todos estos cambios que se produjeron producen dudas y falta de confianza. Necesitamos que los chicos crean en el equipo que tienen, y a partir de ahí ser defensivamente más fuertes en el contacto y no tan especulativos. Tenemos que ser más desafiantes, más intensos. Necesitamos cambiar esa mentalidad del Natación que casi le gana a tal o cual. Hay que salir del casi y arriesgar más. Será muy difícil vencer a los de arriba, pero algún susto queremos darles. Tenemos con qué hacerlo”, concluyó.